Para lucir una piel joven y sana es importante tener un estilo de vida que contribuya a esto. La limpieza, la prevención y la alimentación son factores claves para lograrlo.
Durante el invierno, algunas personas suelen cometer algunos errores que afectan la salud de la piel. La revista Vogue señala tres de estos.
1. Limpiar la cara excesivamente
Es importante tener en cuenta que no se debe utilizar agua muy caliente para limpiar el rostro. Asimismo, tampoco cometer el error de “exfoliarla constantemente y utilizar limpiadores de base alcohólica para limpiar en profundidad pueden dañarla y hacerla más propensa a los eccemas, dermatitis de contacto y a infecciones tanto bacterianas como virales”.
2. No utilizar protector solar
Otro de los errores más comunes es no utilizar protector solar en el invierno. Aunque el día no sea soleado los rayos están presente siempre, incluso estando en la casa hay que aplicar este producto.
“Incluso la mayor parte de rayos del sol causantes de las manchas y el envejecimiento pueden atravesar nuestras ventanas. Dispositivos que utilizamos cada día como las pantallas de los televisores, las computadoras y los teléfonos celulares emiten también luces las cuales pueden empeorar la apariencia de nuestra piel”, apunta la revista.
3. Restarle importancia al cuidado de los labios
Los labios deben ser cuidados todo el tiempo, pues la resequedad puede afectarlos gravemente y causarles grietas. Lo recomendable es utilizar barras hidratantes o manteca de cacao. No es aconsejable arrancarse la piel de esta parte del cuerpo (pellejos).
¿Cómo se debe cuidar la piel?
Consultar a un dermatólogo es un paso muy importante para recibir asesoría profesional adecuada sobre el cuidado de la piel y recibir un diagnóstico correcto en caso de tener alguna afección cutánea.
No es recomendable aplicar productos sin la supervisión de un profesional ni seguir consejos vistos en redes sociales o personas que no están capacitadas.
Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, explica que la protección solar es clave para cuidar la piel.
“Una de las formas más importantes para cuidar la piel es protegerla del sol. Una vida de exposición al sol puede provocar arrugas, manchas de la edad y otros problemas de la piel, así como un aumento del riesgo de cáncer de piel”, apunta la entidad.
Sobre esa misma línea, los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés), explican como la sobreexposición solar afectan negativamente la piel. Por eso, no es recomendable broncearse.
“Con el paso del tiempo, la luz ultravioleta (UV) del sol daña las fibras de la piel llamadas elastina. Cuando estas fibras se debilitan, la piel comienza a perder firmeza y elasticidad, y pierde su capacidad de volver al lugar luego de estirarse. También se forman moretones y grietas con más facilidad, y le lleva más tiempo sanar”, mencionan.
¡Cuidado con el hábito de fumar!
De acuerdo con Taylor Hays, M.D., experto de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, fumar es un factor que puede incrementar el proceso de envejecimiento natural de la piel, contribuyendo a la formación de las famosas “patas de gallo”, líneas de expresión y un tono de piel grisáceo.
Según explica el experto, la nicotina, sustancia que contienen los cigarrillos, hace que los vasos sanguíneos se achiquen, reduciendo el flujo de oxígeno y los nutrientes que van a las células de la piel. “Cuantos más cigarrillos fumes y cuanto más tiempo fumes, más probabilidades tendrás de desarrollar arrugas y otros cambios relacionados con el envejecimiento en el rostro”, agrega.