Inicia el año y uno de los propósitos de millones de personas es bajar de peso, no solo por un tema estético, sino por salud. Sin embargo, esta no es una tarea fácil y por ello las decisiones que se adopten en torno al logro de este objetivo deben ser acertadas.

La primera estrategia a la que suele recurrirse es a las dietas; sin embargo, los resultados no siempre son los esperados y esto está muy relacionado con que se adoptan hábitos que no son los más acertados; la práctica de la actividad física es clave.

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, es natural que cuando alguien desea adelgazar quiera hacerlo rápidamente por medio de dietas, pero la evidencia demuestra que quienes bajan de peso en forma gradual y constante logran mejores resultados a largo plazo.

Pero no es lo único a tener en cuenta cuando se busca perder los kilos de más. Estos son algunos de los errores que se deben evitar si se quiere alcanzar un peso saludable.

Falta de hidratación

Hay personas que no consumen suficiente agua. Este líquido es determinante para que el cuerpo cumpla algunas de sus funciones como regular el metabolismo, por ejemplo. Además, es aconsejable beber un vaso antes de las comidas con el fin de obtener sensación de saciedad.

Comer rápido

La velocidad con la que se ingieren los alimentos tiene incidencia en el plan de adelgazar. Según un artículo publicado en el medio digital Business Insider, masticar y digerir los alimentos lentamente favorece el proceso digestivo y se previenen molestias posteriores. Lo ideal es que en la ingesta de cada alimento principal, no se tarde menos de 20 minutos.

Se eliminan las grasas, pero no el azúcar

Eliminar las grasas y no el azúcar no es suficiente para perder peso. La citada fuente indica que es bueno reducir estas dos sustancias, pero la grasa no debería eliminarse completamente, pues se trata de un nutriente que ayuda a mantenerse lleno y, por lo tanto, evita que el individuo esté ‘picando’ entre horas.

Lo ideal es que esas grasas sean buenas y no saturadas, ni trans. Aquí la recomendación es, por ejemplo, el uso de aceite de oliva, la ingesta de frutos secos y pescados azules que contienen grasas monoinsaturadas.

Dormir demasiado o muy poco

Dormir bien es muy importante si de adelgazar se trata. Evidencia científica ha demostrado que la falta de sueño puede interferir en las hormonas que controlan el peso, así como en el centro de recompensa del cerebro, lo que hace que las personas ganen grasa abdominal, plantea un artículo del diario El Mundo, de España. La recomendación de los expertos es dormir entre siete y nueve horas cada noche.

Alimentos saludables en exceso

Adoptar una alimentación equilibrada es determinante en el propósito de bajar de peso. Incluir verduras, frutas, cereales integrales y carnes magras es lo aconsejable, pero las porciones también deben ser las indicadas. En ocasiones se consumen alimentos que son saludables, pero no en las cantidades que se debe. Es posible que algunos de ellos contengan grasas u otro tipo de componentes cuyo exceso genera resultados adversos.

Restringir alimentos

Cuando se toma la decisión de no comer algunos alimentos, es posible que esto desencadene el deseo de consumirlos o sustituirlos por otros poco saludables, lo que al final aumenta el riesgo comer más.

Tomar zumos de frutas

Lo ideal es comer la fruta al natural. La ingesta de zumos es uno de los hábitos más frecuentes que impide bajar de peso, debido a que al exprimir la pieza de fruta se está desperdiciando toda la fibra y quedándose con el azúcar en estado líquido. Según Business Insider, en la fibra es donde están la mayoría de nutrientes y, además, es el componente que permite mantenerse y sentirse lleno, a la vez que favorece el proceso digestivo.

No hacer ejercicio

Hay muchas personas que quieren bajar de peso recurriendo solo a la dieta, pero lo cierto es que la práctica de actividad física es clave en ese propósito. El sedentarismo impide adelgazar, así las personas adopten un plan de alimentación especial.