El envejecimiento es un proceso biológico y natural. La Organización Mundial de la Salud (OMS) lo define como el resultado de la acumulación de una gran variedad de daños moleculares y celulares a lo largo del tiempo, lo que lleva a un descenso gradual de las capacidades físicas y mentales y a un mayor riesgo de enfermedad.
Las señales más evidentes son las que comienzan a reflejarse en la piel, proceso que inicia alrededor de los 40 años. Estos signos de edad son consecuencia de la disminución hormonal que afecta a las células de la piel y a la producción de colágeno y elastina, precisa una publicación de la revista Muy Saludable, de la compañía Sanitas (España).
Sin embargo, también pueden ser el resultado de otros aspectos como malos hábitos de vida, la contaminación, la exposición indebida al sol y el estrés, que son factores que provocan un envejecimiento prematuro de las personas no solo en la piel, sino en general en el organismo.
Una mala alimentación, los bajos niveles de colágeno en el cuerpo y la falta de descanso, entre otros, aceleran considerablemente este proceso y hacen que sus efectos en el organismo sean más evidentes con el paso de los años.
Para cuidar la salud y evitar los avances prematuros del envejecimiento, la primera recomendación de los expertos es consumir una dieta saludable, además de hacer ejercicio de manera regular. En ese marco, se puede recurrir a la ingesta de algunos tés de plantas que ofrecen propiedades antioxidantes que ayudan a proteger las células del organismo. Estas son algunas de las opciones.
Té verde
Esta bebida, además de ayudar a mejorar digestión, quemar grasa y hasta reducir los niveles de estrés, ofrece beneficios para prevenir los signos de la edad, debido a que es rica en antioxidantes, así como en vitaminas C y E que estimulan la producción de colágeno y elastina en la piel, además de cuidar las células, indica el portal Gastrolab, de México.
Según el portal Healthline, este té también mejora la función cerebral a corto plazo y puede proteger el cerebro del envejecimiento, gracias a que previene el estrés oxidativo, que afecta diferentes células en el organismo.
Té blanco
El nivel de antioxidantes en este producto es alto, por lo que ayuda a la regeneración de las células de la piel, estimulando la producción de elastina y colágeno para la prevención de la aparición de las arrugas en edades tempranas, precisa Gastrolab.
Limón
El agua de limón es un antioxidante recomendado para consumir a diario. Gracias a su contenido en vitamina C, este fruto cítrico protege el cuerpo de los radicales libres, a la vez que ayuda a producir colágeno y glóbulos rojos, precisa un artículo del portal Mejor con Salud.
Granada
La granada es una fruta con un alto contenido de antioxidantes, rica en flavonoides y antocianinas, así como vitaminas C y E. Dado que la cáscara es la que ofrece este mayor poder, se puede secar al sol y triturarla hasta convertirla en un polvo fino, que no solo es posible añadirlo a zumos y batidos, sino con el cual se puede preparar el té. El zumo de la fruta es una de las mejores formas de aprovechar sus bondades.
Diente de león
Esta planta también se caracteriza por sus propiedades antioxidantes, además de diuréticas y desintoxicantes. Mejor con Salud indica que consumir esta planta en té o infusión ayudaría a hacer frente a las líneas finas de expresión que aparecen en la cara, a prevenir las manchas y a quitar arrugas alrededor de los labios y los ojos. Al mismo tiempo, el té de diente de león nutre, reafirma y tonifica la piel flácida.
Albahaca
Esta planta es rica en flavonoides, sustancias que previenen la oxidación de las células y, por lo tanto, ayudan a mantener el organismo en una mejor condición, previniendo el envejecimiento prematuro, precisa el portal Salud 180, de México.