En términos generales, la medicina estética presenta la oportunidad para personas que requieren corregir alguna imperfección que suponga un problema con su bienestar, sin embargo, también es una alternativa para quienes quieren algún procedimiento estético por gusto propio.

Existen muchos procedimientos estéticos pero se deben hacer con un experto en el tema | Foto: Getty Images

Mucho se habla y promociona acerca de procedimientos estéticos como hilos tensores, ácido hialurónico y la toxina botulínica (bótox), siendo este último el más satirizado por la sociedad. Esto sucede —en parte— por la cantidad de personas que han sido víctimas de una mala praxis o por haber acudido a alguien que no es profesional en el área.

No obstante, en los medios abunda el tema de la “huella estética” negativa que este tipo de procedimientos puede generar. Básicamente, con huella estética se refieren a los efectos secundarios a largo plazo de estos tratamientos médico estéticos.

En el caso de tratamientos inyectables, esta huella estética puede ocurrir porque las inyecciones no han alcanzado la profundidad adecuada, el tiempo entre sesiones ha sido demasiado corto o la calidad del producto inyectado no es la mejor. En cambio, habrá una huella estética positiva cuando se logren resultados naturales y se consigan efectos positivos a largo plazo.

La profesional en el tema Marialejandra Siervo enfatiza que para evitar sorpresas indeseadas los pacientes deben estar bien informados antes de realizarse un procedimiento y encontrar a un experto que tenga certificaciones y una buena reputación.

Ella es dueña y fundadora de The Beauty Clinic, una clínica de belleza donde además de realizar diversos tratamientos médico estéticos, tiene un programa de armonización para mujeres que han sido víctimas de violencia doméstica.

De acuerdo con la profesional, los efectos secundarios normales en procedimientos como bótox, hilos tensores o ácido hialurónico son hematomas, inflamación y un poco de dolor. Para las personas que tienen dudas sobre las complicaciones que podrían ocurrir, Siervo menciona que se pueden agravar cuando el profesional no está bien capacitado.

“Las complicaciones pueden variar dependiendo de cada caso, pero una de las complicaciones más comunes con ácido hialurónico es la oclusión de una vena o arteria que si no es tratada a tiempo se puede convertir en una necrosis de tejido. Otra complicación que puede ocurrir con el Botox es una Ptosis parpebral (párpado caído), esto ocurre por el punto de aplicación de la toxina en el músculo depresor ocular”, explica Siervo.

Procedimientos estéticos | Foto: Marialejandra Siervo

En la actualidad ella se encarga de realizar tratamientos estéticos populares e innovadores y conoce de primera mano qué riesgos existen, pero enfatiza que aunque siempre pueden existir complicaciones, mucho depende del profesional al cual se acude.

“Lo ideal es que el paciente se informe muy bien antes de hacerse un procedimiento, que encuentre un profesional en el cual confíe. Siempre pueden existir complicaciones, pero si el profesional que está ejecutando estos procedimientos está muy bien capacitado en complicaciones y cómo solucionarlas, tendrá menos posibilidades de tener complicaciones”, destaca.

Cabe resaltar que también existen otros procedimientos de mucha complejidad y que requieren de algunos chequeos médicos antes para saber la viabilidad o no del procedimiento. Entre los más comunes están la abdominoplastia corrige los defectos del abdomen, tanto en la piel, como en la grasa y la musculatura; de esta forma se mejora su aspecto. Por lo general, las mujeres después del embarazo se someten a este procedimiento para corregir las deformidades que quedaron tras el proceso de gestación.

Y también la gluteoplastia tiene como fin aumentar el tamaño de los glúteos y el proceso se puede hacer por medio de una inyección de grasa, mediante lipoestructura o lipoescultura o con implantes o prótesis.

Marialejandra Siervo | Foto: Marialejandra Siervo