Mantener un peso saludable es clave para el buen funcionamiento del organismo. Adelgazar no solo está relacionado con lucir una buena figura, sino que es clave en el propósito de evitar la aparición de posibles padecimientos de salud, pues el sobrepeso puede derivar en enfermedades crónicas relacionadas con el corazón, por ejemplo.
La Organización Mundial de la Salud resalta que una dieta saludable ayuda a las personas a protegerse de la malnutrición en todas sus formas, así como de afecciones no transmisibles, como la diabetes o el cáncer, las cuales pueden originarse en malos hábitos alimenticios y en problemas de obesidad.
En este proceso la alimentación es clave, pero también lo es la práctica regular de actividad física, pues es la mejor forma de quemar grasa, liberar energía y mantenerse activo. Para sentirse saludable, las calorías que una persona ingiere deben equivaler a la energía que consume, por ello lo ideal es comer menos calorías de las que el cuerpo requiere para desarrollar sus funciones diarias.
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos indica que el ejercicio acelera el metabolismo, especialmente cuando la persona eleva su ritmo cardíaco con la práctica de actividades como el ciclismo o la natación.
De igual forma, aumentar la masa muscular ayuda a bajar de peso y por ello los especialistas recomiendan levantar pesas para conseguir músculos y huesos más fuertes. Lo aconsejable es incluir el entrenamiento de fuerza como parte de un programa de ejercicios bien redondeado que incluya actividades que hagan latir con fuerza el corazón.
Correr
Correr es otra de las acciones físicas que más aportan a la pérdida de peso. Se pueden quemar hasta 600 calorías por hora, dependiendo de la intensidad, precisa el portal Food Spring, de España. Además, para entrenar el sistema cardiovascular y mejorar la condición física, correr también es muy favorable para trabajar las piernas y los glúteos.
Aeróbicos
El instituto de investigación Mayo Clinic indica que la cantidad de calorías que la persona quema depende de la frecuencia, duración e intensidad de las actividades que realice y por ello una de las mejores formas de perder grasa corporal es a través de un ejercicio aeróbico continuado como, por ejemplo, caminar a paso rápido, durante al menos 30 minutos la mayoría de los días de la semana. Algunas personas requieren más actividad física que esta para adelgazar y mantener el peso perdido.
Cualquier movimiento adicional ayuda a quemar calorías y por ello un ejercicio muy sencillo para lograr este objetivo es subir y bajar las escaleras varias veces en cambio de utilizar el ascensor, o estacionar en un lugar alejado de la oficina o del sitio en el que se van a realizar compras.
Un ejercicio adicional muy sencillo y que puede practicarse en cualquier lugar es el jumping jacks, que de acuerdo con los especialistas ayuda a acelerar el ritmo cardíaco y a aumentar la resistencia física. Esta es una práctica que involucra todos los músculos del cuerpo, especialmente los glúteos, los muslos, los abdominales y las piernas.
Se trata de una actividad física completa que quema muchas calorías, generando como consecuencia la pérdida de peso. La recomendación es practicar esta actividad a diario con el fin de obtener los resultados esperados.
En este proceso de que,ar grasa es clave seguir una dieta saludable que permita no solo conservar una buena condición de salud, sino evitar que se incrementen los lípidos en el cuerpo pues, como ya se mencionó, es una problemática que puede ocasionar distintos inconvenientes en el organismo.
Referencias:
Mayo Clinic
Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos