Los riñones son dos órganos en forma de frijol con un tamaño aproximadamente al de un puño, y están ubicados justo debajo de la caja torácica (costillas), uno a cada lado de la columna vertebral, de acuerdo con el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales que hace parte de los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos de Estados Unidos.

Además, la Sociedad Americana Contra el Cáncer explicó que la función principal de los riñones es eliminar el exceso de agua, sal y productos de desecho de la sangre que proviene de las arterias renales y estas sustancias se transforman en orina.

No obstante, todos los seres humanos pierden parte de la función renal mientras van envejeciendo y “la mayoría de las enfermedades renales atacan a los nefrones. Este daño causa que los riñones no puedan eliminar desechos. Las causas incluyen problemas genéticos, lesiones o medicamentos, y la persona puede correr mayor riesgo de padecer una enfermedad renal si tiene diabetes, presión alta, enfermedad cardíaca o un familiar cercano con algún problema de los riñones. La enfermedad renal crónica va dañando los nefrones de a poco con el transcurso del tiempo”, según Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Dicho lo anterior, el portal Mejor con Salud reveló los siete síntomas que se manifiestan cuando hay fallas en los riñones:

1. Retención de líquidos e inflamación.

2. Descontrol en los hábitos de orina.

3. Cambios notorios en la orina.

4. Erupciones cutáneas.

5. Dolor en la zona lumbar.

6. Presión arterial alta.

7. Sensación de fatiga.

Por ello, el Instituto reveló que se puede hacer para mantener los riñones sanos:

  • Elegir alimentos saludables: se deben incluir al menos 400 g (o sea, cinco porciones) de frutas y hortalizas al día, menos del 10 % de la ingesta calórica total de azúcares libres, menos del 30 % de la ingesta calórica diaria procedente de grasas y menos de cinco gramos de sal (aproximadamente una cucharadita) al día y la sal debería ser yodada.
  • Hacer ejercicio: las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, y un promedio de 60 minutos al día para los niños y adolescentes.
  • Tener un peso saludable: El Ministerio de Salud en su página web explicó que para saber si una persona está en un peso saludable, existen algunos métodos confiables. Uno es la determinación del Índice de masa corporal (IMC), que describe la relación entre peso y estatura y para calcular el IMC se necesita conocer el peso y la estatura y se aplica una sencilla fórmula matemática que consiste en dividir el peso entre la estatura al cuadrado: IMC = Peso (Kg) / Estatura al cuadrado (Mt).

Ejemplo: Una persona pesa 64 Kg y mide 1.5 metros: 64 / 1.5 x 1.5 = 28.44. Este dato indica el IMC de la persona (28.44) se encuentra en los valores correspondientes a sobrepeso.

  • No fumar o dejar de hacerlo y limitar el consumo de alcohol.
  • Reducir el estrés.
  • Controlar la diabetes, la presión arterial alta y la enfermedad cardíaca.

De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.