El hígado es un órgano que cumple varias funciones en el organismo, por lo que se considera como uno de los más importantes y de mucho cuidado en el cuerpo. El National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases de Estados Unidos explica que la digestión de los alimentos -justamente el procesamientos y distribución de los nutrientes extraídos de la comida- sería parte de las funciones que cumple este órgano.
A esta función se le suma el almacenamiento de la energía y la eliminación de las toxinas, según recoge el portal aliado a la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, Medline Plus, el cual también aprovecha para recordar que este órgano sería el de mayor tamaño al interior del organismo; y continúa explicando que son varios lo tipos de enfermedades que el hígado puede desarrollar, a las cuales se les denomina como “enfermedades hepáticas”.
Así entonces, Medline Plus afirma que hay un tipo de enfermedades causadas por ingerir demasiado alcohol, exceso de drogas, venenos o diferentes toxinas que pueden terminar desarrollando complicaciones, como el hígado graso o la cirrosis. Por otro lado, virus en el cuerpo pueden llegar a producir hepatitis, en alguna de sus clasificaciones: A, B y C. También se puede diagnosticar un cáncer de hígado o presentar enfermedades hereditarias, como la hemocromatosis y, la enfermedad de Wilson, entre otras.
Ante este panorama, es importante tener en cuenta cuáles son las alertas que el organismo emite para anunciar las fallas que se están teniendo en el hígado. Los síntomas de estos padecimientos pueden a llegar a ser característicos de enfermedades hepáticas, por lo que si una persona los detecta, se recomienda que asista a un centro médico y adelante los exámenes pertinentes.
Para la organización estadounidense Mayo Clinic, este tipo de padecimientos no siempre tendrían síntomas perceptibles, sin embargo, alerta por algunas complicaciones como picazón en la piel, hinchazón en piernas, tobillos, estómago y dolor abdominal, fatiga crónica, pérdida del apetito, color pálido en las heces y orina oscura, náuseas y vómitos, si se forman moretones fácilmente y, por último, el que sería uno de los síntomas más contundentes de este tipo de enfermedades:el color amarillo tanto en la piel como en los ojos, el cual también es denominado como ictericia.
Según la Organización Panamericana de Salud (OPS), para el continente americano anualmente se tendrían alrededor de 10.000 nuevas infecciones por el virus de la hepatitis B, y unas 23.000 muertes a causa de esta enfermedad. Empero, solamente el 18 % de las personas con este padecimiento llegaría a diagnosticarse, y con respecto a aquellos que llegan a obtener un tratamiento para la enfermedad, la organización estipula que serían cerca del 3 %.
Con respecto a aquellos que padecen de hepatitis C, otra de las enfermedades causadas por la infección del hígado, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), para América se estarían produciendo 67.000 nuevas infecciones por el virus cada año, y unas 84.000 muertes debido a este padecimiento. De acuerdo a las cifras de la OMS sobre las personas que llegan a tener un diagnóstico sobre este padecimiento, se estima que serían solamente el 22 %, de las cuales únicamente el 18 % estaría recibiendo un tratamiento.
Es por esto que hay que tener en cuenta la sintomatología expuesta, a cualquier persistencia de alguno de ellos se debe asistir a un especialista médico que dictamine el origen del síntoma y establezca un tratamiento a seguir.