En los últimos años, se ha popularizado el esmalte semipermanente entre las mujeres que desean mantener sus uñas impecables durante varias semanas sin necesidad de acudir a los retoques frecuentes que puede quitar tiempo.

Es muy común caminar por la calle y ver que los salones de belleza están congestionados debido a la cantidad de mujeres que optan por esta alternativa eficaz para cuidar de su presentación personal.

Aunque son claras las comodidades que brinda, este tipo de manicura no está exenta de riesgos. Es importante que las personas comprendan los posibles riesgos asociados y tomen medidas para proteger la salud de sus uñas y manos.

Los posibles daños de las lámparas UV en las uñas | Foto: Gettyimages

Debilita las uñas: Entre las preocupaciones que surgen de este procedimiento están que el proceso de aplicación y eliminación del producto puede debilitar las uñas naturales. Elegir un profesional experto en el tema, es fundamental para que el retiro del esmalte semipermanente se haga correctamente. En ocasiones la acetona puede adelgazar las uñas, volviéndose más propensas a la descamación.

Daños en las cutículas: Un procedimiento mal realizado puede causar daños en la barrera natural de la piel, lo que puede ocasionar la entrada de bacterias que con el tiempo provoquen una infección en la zona.

Sensibilidad a las lámparas UV: Este tipo de dispositivos emiten una luz ultravioleta que permite que el esmalte se endurezca y se adhiera a las uñas, brindando mayor durabilidad y resistencia. No obstante, algunas personas pueden ser sensibles a este tipo de luz.

Exposición a sustancias fuertes: Algunos productos están diseñados con químicos fuertes que pueden causar reacciones alérgicas y sensibilidad en algunas mujeres.

Precios más altos: Si bien es cierto, acceder a una manicura semipermanente es un poco más costoso que el esmalte tradicional, tanto en aplicación, retoque y remoción.

Una de las principales ventajas del esmalte semipermanente es su duración prolongada | Foto: Gettyimages

Son muchos los mitos que existen alrededor de este procedimiento, así como también algunos riesgos que quizá algunas personas pasan por alto. Sin embargo, no deja de ser una opción muy útil para aquellas mujeres que prefieren una durabilidad extensa.

Es importante que elija un sitio de confianza, así como también un profesional que implemente todas las prácticas higiénicas y de esterilización adecuadas. Asimismo, puede darle a sus uñas periodos de descanso entre las aplicaciones para evitar que estas se debiliten con rapidez.

Con respecto al cuidado de la uñas, usted puede tener hábitos saludables que le ayuden a mantener sus uñas en buen estado, por ejemplo, con ayuda de ingredientes naturales, como el ajo.

El ajo es un ingrediente muy conocido por sus beneficios para las uñas. | Foto: Getty Images

Uno de los beneficios pocos conocidos del ajo es que ayuda a mejorar la estructura dañada en las uñas de las manos y los pies, dando brillo y reduciendo los efectos negativos que traen los radicales libres. Se afirma que el ajo previene la aparición de bacterias y hongos en las uñas. Además, aporta minerales como magnesio y calcio, que permitirán conservar el esmalte favoreciendo la circulación sanguínea.

¿Cómo usarlo?

Para obtener estos beneficios se debe cortar en dos partes y aplicarlo sobre las uñas preferiblemente en la noche, ya que como muchos saben el ajo suelta un olor bastante intenso que resulta desagradable. Por lo que la mejor forma de tenerlo en las uñas es en el momento de irse a dormir.

También se pueden obtener los beneficios preparando un esmalte casero con dientes de ajo y aceite de oliva que ayudará a hidratar las uñas. Para esto se deberá machacar los ajos o cortarlos en trozos muy finos. Luego se debe añadir un bote de esmalte transparente a la mitad. A esto se le deberá agregar media cucharada de aceite de oliva y posteriormente agitarlo. Este esmalte deberá aplicarse sobre las uñas al menos unas tres veces por semana antes de dormir.