De acuerdo con la Organización Mundial para la Salud (OMS) “se estima que el consumo de grasas trans de producción industrial provoca unas 500.000 muertes anuales por cardiopatías coronarias”. Asimismo, su consumo es un factor que incide en la obesidad y en el sobrepeso para el desarrollo de enfermedades del corazón.
Por esto, es importante tener una dieta balanceada rica en frutas y verduras junta con proteínas que contribuyan a la salud del cuerpo. Adicional a esto, la entidad indica que el consumo elevado de sodio puede ser también dañino porque altera la presión arterial.
La insistencia de las organizaciones de salud, tanto privadas como públicas, no atañe a tener una figura esbelta, sino a reducir las probabilidades de riesgo de sufrir algún accidente cerebrovascular (ACV) o afecciones del corazón, que aunque muchos son los ítems que pueden causar estas enfermedades, las principales causas son la falta de ejercicio y una dieta desequilibrada.
El tipo de grasas saludables para el cuerpo
La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados, Medline Plus, explica que consumir alimentos que tengan grasas insaturadas puede ayudar a reducir los niveles del colesterol LDL que se considera malo, por lo que los aceites vegetales son una alternativa de estos productos.
Dentro de estas grasas se encuentran las monoinsaturadas (aceite de oliva, por ejemplo); y las poliinsaturadas (aceite de maíz o girasol).
- Grasas monoinsaturadas: estas se conocen por ser “líquidas a temperatura ambiente”, que se endurecen cuando se enfrían, explica la entidad americana. Entre los alimentos que se encuentran estas grasas están: el aguacate, las nueces y los aceites vegetales.
Como se indicó anteriormente, este tipo de grasa ayuda a reducir el colesterol LDL, contribuyendo también en la producción de células y su bienestar.
Es de mencionar que aunque estas grasas son saludables, una alta ingesta puede ser perjudicial, ya que son indicadores de un posible aumento de peso.
- Grasas poliinsaturadas: Medline Plus, las describe como “grasas dietarias” que tienen omega-3 y omega-6. El salmón y las nueces son productos que están compuestos de ellas.
Son tales sus funciones que ayudan en la reducción del colesterol LDL (malo), ya que al adherirse a las paredes de los vasos sanguíneos puede causar taponamiento en las arterias, aumentando el riesgo de un ACV.
Las funciones de los ácidos grasos
Es de mencionar que el cuerpo necesita grasa porque de ella también obtiene energía, solo que debería obtenerla de alimentos saludables.
- El omega-3 puede reducir la arritmia, regular la presiona arterial, disminuir los triglicéridos, por ejemplo.
- El omega-6 ayuda en la regulación de la presión arterial, la disminución de probabilidades de diabetes y de hiperglucemia.
El colesterol y la presión arterial
La Clínica Mayo lo describe como una “sustancia cerosa” que se adhiere en las paredes de los vasos sanguíneos obstruyendo el flujo de la sangre provocando enfermedades cardiacas o un ACV.
Es de mencionar que existen dos tipos: el LDL y el HDL, considerado el primero como malo; y el segundo como bueno.
Esta afección en la mayoría de los casos se debe a una mala alimentación, es decir, el consumo de productos que son elaborados con grasas trans o saturadas que no aportan nutrientes al organismo. Por lo que se aconseja reemplazarlas con grasas naturales como el aguacate.
La presión arterial alta es conocida también como hipertensión, la Clínica Mayo, la define como “una afección frecuente en la que la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de tus arterias”, dando permiso al desarrollo de otros problemas como insuficiencias cardíacas.
Por último, se recomienda consultar con un nutricionista para diseñar un plan de alimentación adecuado.