La manzana es una fruta que además de tener un gran sabor, reúne altas cantidades de nutrientes que le ayudan al organismo a funcionar de forma correcta. Es de vital importancia no ingerirla en exceso para para que sus propiedades actúen de buena manera en el cuerpo.

“Es rica en pectina, un tipo de fibra soluble que no se absorbe en el intestino. Retiene el agua y se convierte en un gel que actúa como una emulsión que absorbe desechos en el intestino y facilita la eliminación de toxinas” por la vía intestinal, según el portal especializado Cuerpo Mente.

De igual manera, se destacan los ácidos orgánicos únicos de este alimento, “que representan entre el 1 % y el 1,5 % del peso de la manzana. Dichos ácidos producen al metabolizarse un efecto alcalinizante (antiácido) en la sangre y los tejidos, toda que la acidez favorece la inflamación y previene la aparición de enfermedades como el cáncer”.

La manzana también contiene boro, vitamina C, que estimula el sistema inmunológico, además de vitamina E, potasio y fósforo. Esta fruta, además, previene el estreñimiento, ya que, su alto contenido en fibra favorece el tránsito intestinal y ayuda a la digestión de las grasas.

Para controlar el colesterol, se recomienda tomar 3-4 manzanas diarias. | Foto: Getty Images

Tiene poder antioxidante y mejora el sistema inmune. Es muy nutritiva, disminuye la fatiga y, por si fuera poco, es buena para la salud de los dientes y las encías.

De igual manera, Cuerpo Mente indicó que “para controlar el colesterol se recomienda tomar 3-4 manzanas diarias. Para producir este efecto se combinan las propiedades de la pectina (que absorbe las sales biliares) y los flavonoides (inhiben la agregación plaquetaria, con lo que reduce el riesgo de infarto de miocardio)”.

Asimismo, “para los diabéticos la manzana es ideal por dos razones: una buena parte de su azúcar está en forma de fructosa, que no precisa de insulina para entrar en las células y, en segundo lugar, la pectina ayuda a regular la liberación de azúcares, lo que permite que su paso a la sangre sea lento y progresivo”, explica el portal.

Para bajar el colesterol y el azúcar en la sangre, la manzana se puede consumir en agua. Para esto se debe cortar una manzana grande en trozos pequeños y ponerlos en una olla con cuatro tazas de agua. Luego, se enciende el fuego, se deja hervir y se espera a que el agua de la olla se reduzca hasta la mitad. Por último, se cuela el líquido obtenido y se deja que se enfríe.

La manzana es una fruta que además de tener un gran sabor, reúne altas cantidades de nutrientes que le ayudan al organismo a funcionar de forma correcta. | Foto: Getty Images

Vinagre de manzana

El vinagre de manzana es un producto natural, el cual se extrae de la trituración y la posterior fermentación de las manzanas, llevando así a la elaboración de un condimento alimentario que se destaca por una rica composición de nutrientes, como los ácidos, los flavonoides, las vitaminas y los minerales. Este extracto es uno de los remedios caseros más utilizados para desintoxicar el organismo.

Según el portal Terra, el vinagre de manzana se debe tomar en ayunas, ya que tomarlo en esa hora del día trae un compilado de beneficios. No obstante, antes de probarlo y realizar algún cambio en la dieta, la mejor opción será consultar con un profesional de la salud.

Estos son algunos de los aspectos más importantes del vinagre de manzana:

  • El vinagre mejora la sensibilidad a la insulina durante una comida alta en carbohidratos en un 19 % a 34 %.
  • Reduce significativamente la glucosa en sangre y aumenta la respuesta a la insulina.
  • Reduce el azúcar en la sangre en un 34 % cuando se comen 50 gramos de pan blanco.
  • Dos cucharadas de vinagre de manzana antes de acostarse pueden reducir la glucemia en ayunas en un 4 %.
El vinagre de manzana tien múltiples beneficios para la salud del cuerpo. | Foto: Getty Images
  • El vinagre puede interactuar con los medicamentos.
  • Puede ser peligroso para los diabéticos insulinodependientes.
  • No es recomendable para personas con úlceras estomacales.