Usualmente, la manzana es utilizada para representar la alimentación saludable, una imagen que no se aleja de la realidad, más si se tiene en cuenta que se trata de un alimento con gran riqueza nutricional.
Así lo respaldan varias investigaciones, las cuales han demostrado los beneficios de añadir este ingrediente a la alimentación. Un detallado estudio realizado por los doctores Boyer y Liu, de la Universidad de Cornell, referenciado por Cuerpo Mente, indica que hay una relación positiva entre la ingesta de manzanas y el desarrollo de enfermedades circulatorias, del corazón, cáncer, pulmón y diabetes, siendo este alimento beneficioso para reducir las probabilidades de padecer dichas afecciones.
Como señala el portal sobre salud y bienestar unCOMO, bien reza un dicho que “comer una manzana al día mantiene al médico lejos”. Lo que es mejor, existe una gran variedad de donde elegir.
De acuerdo con la Fundación Española de la Nutrición, hay más de mil variedades de manzana en el mundo, aunque solo son reconocidas cerca de media docena que se encuentran disponibles en el mercado. Las clases más populares de esta fruta son Delicia, Reineta, Granny Smith, Golden, Starking y Gala.
La guía de alimentos publicada por esta organización especifica que la manzana contiene carbohidratos en forma de azúcares, tales como la fructosa, glucosa y sacarosa. Además, posee cantidades significativas de fibra, tanto soluble como insoluble.
También, resalta su contenido en procianidinas, compuestos que se destacan por su acción antioxidante.
Con respecto a otros nutrientes, la manzana es una fruta rica en vitaminas, como la vitamina A, la vitamina E o tocoferol, la vitamina C y la familia de las B, con un aporte de vitamina B1, vitamina B2, vitamina B5 y vitamina B6.
¿Cuáles son sus principales beneficios?
La lista de beneficios asociados a la manzana es larga, ya que favorece la salud general del organismo. Entre sus propiedades, el portal sobre salud unCOMO afirma que este fruto aporta a la buena memoria y a mejorar la masa muscular.
En primer lugar, gracias a su composición rica en vitaminas del complejo B, como la vitamina B1 y B6, las manzanas contribuyen a reforzar la memoria y favorecen la actividad del cerebro, ya que disminuye el agotamiento mental.
Por otra parte, se consideran un alimento bueno para el sistema nervioso, puesto que su contenido rico en minerales como fósforo, potasio y sodio, estimulan la conducción nerviosa.
Los nutrientes presentes en la manzana también ayudan a mejorar la salud de los músculos. Especialmente, a la familia de las vitaminas B se le atribuyen bondades para la capacidad muscular: “la vitamina B1 previene el cansancio muscular, la vitamina B2 mejora la obtención de la energía y la vitamina B6 interviene en las proteínas que forman la masa muscular”, precisa el mencionado portal.
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Una receta fácil para integrar las manzanas a la dieta
El blog de recetas y gastronomía PequeRecetas compartió una receta sencilla de preparar para disfrutar del sabor de las manzanas. Se trata de un plato de empanadillas dulces de manzana y canela al horno.
Ingredientes:
- 2 manzanas Reineta (o Golden)
- 2 ó 3 cucharadas de azúcar moreno
- Medio vaso de agua
- 14 obleas para empanadillas (o, en su defecto, masa para empanadas al horno)
- Canela en polvo
Preparación:
- Tenga en cuenta que antes de preparar la receta, se debe precalentar el horno a 200°C.
- Mientras, lavar muy bien las manzanas y cortarlas en pequeños trozos cuadrados, de un tamaño aproximado a un centímetro o menos.
- En una olla, a fuego bajo, agregar las manzanas, el agua y el azúcar. Dejar cocinar durante unos cinco minutos antes de agregar la canela al gusto.
- Ir revolviendo mientras se cuece a fuego lento, evitando que se pegue a la olla. Asimismo, se aconseja ir verificando que los trozos de manzana se ablanden.
- Esta preparación será el relleno de las empanadillas. Para ello solo será necesario tomar un poco de la masa y llenar solo una de las mitades, dejando el espacio de los bordes para poder unir las dos partes, apretando muy bien (inclusive, se puede ayudar con un tenedor para darle un diseño al borde de la empanadilla).
- Finalmente, se deben cubrir con un la mezcla de un huevo batido, apoyándose de una brocha, también se le puede espolvorear un poco de azúcar por encima.
- Llevar al horno entre 20 y 25 minutos, hasta que las empanadillas estén doradas.