Las mascarillas caseras aportan varios beneficios, ya que sus ingredientes le aportan propiedades regenerativas a la piel y le ayudan a recuperar la lozanía perdida.
De hecho, el portal Salud180 reveló una mascarilla de vitamina E con colágeno para quitar las arrugas y que esta se vea joven y, para prepararla, hay que mezclar tres cucharadas de colágeno en polvo con ½ taza de agua de rosas y cuando se consiga una mezcla homogénea sin grumos se añaden dos cápsulas de vitamina E más una cucharadita de leche entera. En seguida, cuando todos los ingredientes estén integrados se procede a aplicar la mezcla sobre el rostro y se deja actuar por 40 minutos para, finalmente, retirar con agua fría.
Ahora bien, es importante señalar que para obtener resultados hay que tener constancia y lo ideal es aplicar la mascarilla dos veces por semana.
De todos modos, antes de aplicar alguna mascarilla en el rostro se debe realizar una prueba de alergia o se debe consultar a un experto de la salud, para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
Por su parte, MedlinePlus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, reveló que otros tratamientos para las arrugas son:
- La tretinoína (Retin-A) o las cremas que contengan alfa-hidroxiácidos (tales como ácido glicólico).
- La quimioabrasión, la exfoliación por láser, o la dermoabrasión funcionan bien para las arrugas prematuras.
- Los medicamentos que se inyectan debajo de la piel pueden llenar las arrugas o estimular la producción de colágeno.
- Cirugía plástica para el tratamiento de las arrugas relacionadas con la edad (por ejemplo, un estiramiento facial).
Entretanto, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, indicó que para la prevención de las arrugas se puede:
1. Proteger la piel del sol:
- La American Academy of Dermatology (Academia Estadounidense de Dermatología) recomienda usar un protector solar de amplio espectro con SPF de 30 o más y hay que aplicar abundante cantidad de protector solar y se debe volver a aplicar cada dos horas, o con más frecuencia, si se está nadando o transpirando.
- Buscar lugares con sombra. Evitar el sol entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, ya que los rayos solares son más intensos.
- Usar ropa de protección. Hay que proteger la piel con prendas de tejidos ajustados y mangas largas, pantalones largos y sombreros de ala ancha. También se debe tener en cuenta los productos para lavandería que pueden proporcionarle a la ropa una capa adicional de protección ultravioleta durante una cantidad determinada de lavados, o prendas especiales para protegerte del sol, que están especialmente diseñadas para bloquear los rayos ultravioletas.
2. Seguir una dieta saludable: hay algunas pruebas de que ciertas vitaminas como la C y E que ayudan a proteger la piel. Asimismo, es importante aumentar la producción de colágeno y entre los alimentos que más se recomiendan para mejorar la producción del colágeno son: el pescado, los huevos, las verduras, las carnes rojas y los frutos secos, al igual que otros que contengan omega-3.
Asimismo, otros alimentos que ayudan a producir colágeno son: huevos, verduras, al igual que otros que contengan omega-3, pollo, cítricos (naranjas y pomelos/toronjas), bayas (fresas, frambuesas, arándanos y moras), frutas tropicales (mango, kiwi, piña, melón y guayaba), ajo, hojas verdes (espinaca, col rizada, acelgas, brócoli y demás verduras de ensalada) y tomates.