A medida que pasan los años, las células se van muriendo y van quedando encima de la piel, las cuales forman una capa delgada sobre la dermis, impidiendo que esta respire y se dificulte la regeneración. De acuerdo con los expertos, además de la edad, esto sucede también por la contaminación, los cambios hormonales y la alimentación afectan al metabolismo celular.

Adicional a ello, otro factor causal de las células muertas en la piel es la falta de exfoliación. Como tal, este proceso ayuda a la eliminación de las células muertas y también ayuda a mantener la buena salud de la piel, por lo que es fundamental aprender a realizar este proceso.

Para tener una piel saludable, libre de impurezas, es importante tener buenos hábitos de vida desde temprana edad, que dependa básicamente de una buena hidratación de la piel, una correcta limpieza y una adecuada alimentación. Respecto a la limpieza de la dermis, los expertos aconsejan exfoliar la piel cada 15 días.

A medida que pasan los años, las células se van muriendo y van quedando encima de la piel. | Foto: Getty Images

A continuación, el portal web Tua Saúde destaca las propiedades de la mascarilla de avena y aceite de coco, no solo para eliminar las células muertas de la piel, sino también para destapar los poros:

Ingredientes

  • 2 cucharadas de salvado o harina de avena;
  • 3 cucharadas de aceite de coco.

Preparación y uso: en primer lugar se debe mezclar la avena y el aceite de coco hasta formar una pasta homogénea. Enseguida, aplicar esta mezcla sobre el rostro limpio y seco, realizando ligeros movimientos circulares, con la yema de los dedos, durante 10 minutos. Finalmente, se debe lavar el rostro con agua tibia y un jabón neutro para eliminar todos los residuos del exfoliante. Lo ideal es utilizar esta mascarilla natural 1 vez por semana.

La mascarilla de avena y aceite de coco, no solo para eliminar las células muertas de la piel, sino también para destapar los poros. | Foto: Getty Images /Guido Mieth

Es importante recordar que la combinación de avena y aceite de coco favorece principalmente la limpieza y eliminación de puntos negros, dado que tiene acción antioxidante que ayuda a hidratar y nutrir la piel, dejándola más saludable y sedosa.

¿Cómo limpiar correctamente la piel?

La limpieza de la piel es necesaria para poder remover las células muertas y la grasa que se suele acumular en la zona a lo largo del día; por eso, por las noches se recomienda remover esas impurezas con un jabón especial para la piel del rostro. Una vez hecho esto se puede aplicar agua de rosas, con ayuda un atomizador, dejar que se impregne en la piel, para luego humectar por medio de un sérum.

En la mañana se puede limpiar la piel con un tónico, posteriormente se puede aplicar crema hidratante y para finalizar es crucial el uso de protector solar. Este último producto se debe aplicar a diario sin importar el clima de la ciudad donde se viva y si se va a salir de casa o no. Los utensilios idóneos para cada paciente deben sugeridos por un dermatólogo, ya que cada piel cuenta con características diversas.

El cuidado de la piel debería tenerse en cuenta desde la juventud. | Foto: Getty Images / Voyagerix

Durante la temporada de invierno o quienes viven en clima frío suelen tener la piel más reseca, por ende requiere de dosis adicionales de hidratación que se pueden brindar por medio de cremas o mascarillas caseras.

El portal Montsia en su sección de belleza y cuidado personal brinda una alternativa para mejorar el aspecto de la piel de quienes se les reseca con facilidad; a su vez, la aplicación de la misma les ayudará a eliminar las células muertas que suelen acumularse en la zona a lo largo del día.

Es fundamental mencionar que esta mascarilla solo se debe aplicar si se cuenta con la aprobación de un profesional en el tema como lo es un dermatólogo, ya que puede generar alergias o reacciones adversas en la zona donde se aplique.

Ingredientes

  • Una taza de agua.
  • Media cucharada de miel.
  • Una cucharada de leche.
  • Tres cucharadas de arroz.

Preparación y aplicación:

  • Para preparar esta mascarilla japonesa, se debe cocinar el arroz durante tres minutos y escurrirlo, pero sin tirar el agua.
  • Después hay que mezclar el arroz, la leche y la miel en un recipiente hasta formar una pasta fina.
  • Después, retirarla y limpiar el rostro con el agua de arroz que se había separado antes para eliminar las pequeñas impurezas que queden.
  • Para ver resultado, el medio recomienda aplicar esta mascarilla una vez en la semana.