Los azúcares que se ingieren con los alimentos son transformados por el metabolismo en glucosa y cuando el metabolismo de la insulina no funciona correctamente, las células de los tejidos dejan de asimilar correctamente la glucosa y esta se acumula en la sangre, de acuerdo con el Grupo Sanitas de España.

Por ello, para conocer los niveles de glucosa se debe realizar un examen de sangre o se puede medir con un glucómetro y para usarlo se debe:

1. Lavarse las manos con agua y jabón.

2. Frotar las manos para estimular el flujo de sangre en los dedos.

3. Encender el glucómetro e insertar la tira reactiva.

4. Desinfectar la yema del dedo con alcohol y dejar que se seque.

5. Insertar la lanceta en el lancetero y pinchar el dedo para extraer sangre.

6. Apretar el dedo hasta que se forme una gota de sangre.

7. Coloca la gota de sangre en la tira reactiva.

8. Esperar hasta que el glucómetro muestre los resultados.

9. Desechar la lanceta y la tira reactiva.

Así las cosas, lo recomendable es que la glucemia se mida al levantarse por la mañana y antes del desayuno y se considera normal si los niveles de glucosa que se sitúan entre los 70 y 100 mg/dl en ayunas y en menos a 140 mg/dl dos horas después de cada comida.

La voz de alarma se da cuando los niveles de glucosa en sangre estando en ayunas se sitúan entre 100 y 125 mg/dl y después de comer entre los 140 y los 199 mg/dl.

Por ello, si los niveles están elevados, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde reveló que el consumo de albahaca reduce el azúcar en la sangre, ya que “algunos estudios científicos indican que la albahaca podría ayudar a regular el azúcar en la sangre, debido a que estimula la secreción de insulina por parte del páncreas, inhibe la producción de glucosa en el hígado e incrementa la producción de glucógeno, pudiendo ser una excelente opción para ser incorporada en la dieta de las personas que sufren de diabetes y de prediabetes”.

Ahora bien, al igual que con cualquier remedio natural, es importante tener en cuenta que no en todos los organismos funciona de manera positiva. En ese sentido, entre los efectos secundarios y contraindicaciones de la albahaca, se incluyen algunas reacciones alérgicas, y está contraindicada en altas dosis durante el embarazo, en niños con menos de dos años y durante el período de lactancia materna.

Por tal razón, antes de consumir algún alimento, lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.

Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó que se ha demostrado que existen algunas medidas simples relacionadas con los hábitos que previenen eficazmente o que retrasan la aparición de la diabetes como, por ejemplo:

  • Tener una dieta saludable: Esta debe incluir al menos 400 g (o sea, cinco porciones) de frutas y hortalizas al día, menos del 10 % de la ingesta calórica total de azúcares libres, menos del 30 % de la ingesta calórica diaria procedente de grasas y menos de cinco gramos de sal (aproximadamente una cucharadita) al día y la sal debería ser yodada.
  • Evitar los alimentos que suben la insulina en la sangre como chocolates, caramelos, mermeladas, miel, helados, gaseosas, alcohol, galletas dulces, comida rápida, harina de trigo refinada, cereales azucarados, entre otros.