El momento, que ella define como revelador, se dio durante un viaje a Asia. En concreto, en la última estación del itinerario: China. Fue durante el Festival de Yulin, y a Catalina Robayo, modelo, presentadora, y activista por el planeta, le impresionó una de las consignas del evento: “Entre más sufre el animal, en este caso los perros, aumentan sus propiedades gastronómicas”.

Pero, antes de conformarse con la idea de que “los chinos están locos, ¿cómo se les ocurre hacer eso?”, Catalina habló con las personas del lugar y llegó a la conclusión de que el consumo de cualquier carne, sea de res, cerdo, pollo o perro, no es simplemente una cuestión religiosa y fisiológica.

“Es un tema cultural”, indica en esta nueva entrega de Megatendencias, un pódcast sobre lo que nos pasa hoy, conducido por Claudia Lucía González Osorio, editora del Grupo Semana, al explicar cómo esta experiencia en China incidió para dejar atrás las dudas —”¿De dónde voy a consumir la proteína?” “Me voy a desmayar”?— y tomar una decisión que ya venía pensando hacía algún tiempo: adoptar una alimentación vegetariana.

“Priorizamos, en orden de escala, la importancia de la vida. Y la vida es vida, independiente del cuerpo”, añade.

En este episodio, Robayo, ganadora del Concurso Nacional de Belleza en 2010, revela, además, cuál fue la motivación más grande que tuvo para crear su fundación Animal Voices, que promueve, por ejemplo, jornadas de esterilización gratuitas en zonas vulnerables de Colombia con el fin de disminuir las cifras de abandono de animales domésticos.

Explica, por otro lado, su estilo de vida friendly, el cual no solo se limita al activismo por los animales o a la alimentación vegetariana: “El compromiso con el planeta está  profundamente ligado con nuestros hábitos cotidianos”.

Y, claro, con nuestros hábitos de consumo. “Nos importa más tener una camisa de algodón que diez años de agua”, alerta.

También reflexiona sobre la actitud de muchas personas que no le dan importancia al cuidado medioambiental, justificando que todo es fatalismo y exageración, pues se justifican diciendo que “el mundo no se va a acabar en dos años”. Sin dejar de lado los diferentes prejuicios que existen al respecto: “No se trata de volvernos minimalistas y vivir en la mitad de la selva. Podemos seguir con dinámicas de sostenibilidad, de consumo consciente”, complementa.

Mientras la gente se debate sobre la urgencia del cuidado ambiental, el agua ya cotiza en Wall Street, un hecho coyuntural frente al cual, cómo no, Catalina Robayo expresó su punto de vista.

Y, no sin antes reflexionar sobre la pandemia y hablar de sus proyectos personales —por ejemplo, un taller que ofrece en la página web de su proyecto Vida Friendly—, reflexiona sobre el rol de las redes sociales frente al compromiso ambiental por parte de las celebridades. En ese contexto, recuerda algo muy particular que le pasó a Sebastián Yatra y a JBalvin.

Los invitamos, entonces, a escuchar este episodio y a compartir su retroalimentación en nuestras redes sociales.