La compañía finlandesa de telecomunicaciones y tecnología Nokia se encuentra a menos de lo esperado de disponer junto a la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (Nasa) un despliegue de la primera red inalámbrica privada en el satélite natural de la Tierra, la Luna.
El principal objetivo de la misión espacial de la agencia del gobierno estadounidense junto a Nokia es implementar conectividad la cual haga posible que, desde la superficie del cuerpo celeste, se efectúen exploraciones gracias a la tecnología.
La planeación del proyecto empezó en el 2020, la Nasa firmó en ese entonces el acuerdo del vínculo entre organizaciones y en 2023 se hará realidad lo que en un principio solo fue imaginativo. Los aparatos de conexión serán enviados en un cohete SpaceX.
El miembro distinguido del personal técnico de Nokia y ejecutivo Holly Rubin comentó cómo se llevará a cabo la implementación de conexión inalámbrica en el satélite natural, según Digitaltrends.
En un comunicado publicado por el conglomerado multinacional dijo que es fundamental que el proyecto se haga de la mejor manera posible. “Un solo componente que funcione mal podría significar la diferencia entre el éxito y el fracaso de la misión”, aseguró.
A pesar de la aprobación, la empresa de telecomunicaciones aún tiene claro que en la Luna se pueden presentar altercados en donde por polvo lunar, radiación cósmica y temperaturas de hasta -100 ° C, lo que pondría en riesgo la operación. Por otro lado, agregan que el vacío del espacio también se podría entrometer, ya que el equipo de red a veces tiene líquidos sin sellar y estos posiblemente llegarían a evaporarse.
Las exploraciones científicas del espacio exterior cada vez toman mayor representatividad y con el lanzamiento de la misión inalámbrica el próximo año, se espera ahondar en el estudio de la Luna. Por eso, se trabaja en la construcción de robots.
Hillary Smith de la Nasa escribió que la compañía Intuitive Machines crea robots de minería los cuales tendrían que comunicarse con “una estación base ubicada en Nova-C, y el módulo de aterrizaje comunicará datos a la Tierra. Esta demostración podría allanar el camino para un sistema comercial LTE para comunicaciones de misión crítica en la superficie lunar. Esto incluye comunicaciones e incluso transmisión de video de alta definición de astronautas a estaciones base, vehículos a estaciones base y más”.
En efecto, dichos robots perforarán agujeros de una profundidad considerable que posiblemente brindarán información para otras misiones contempladas.
“El avance de este tipo de tecnologías es fundamental para establecer una presencia robusta y a largo plazo en el espacio profundo, incluso en la Luna como parte de las misiones Artemis de la agencia. Simplemente operar y perforar en la dura superficie lunar proporcionará información valiosa a los ingenieros para futuras misiones lunares, como la misión Volátiles Investigación Polar Exploration Rover, o VIPER, que está programada para aterrizar en el Polo Sur lunar a fines de 2023″, precisó Smith.
Por otro lado, al finales de enero de este año un estudio publicado en la revista académica Icarus, publicó que la luna más interna de Saturno -la cual dicen que se parece mucho a la famosa estrella de la muerte de Star Wars- podría ser un mundo oceánico “sigiloso”.
De las 82 lunas del planeta, Mimas, que es la más pequeña y cercana a Saturno, al parecer tendría un océano líquido interno. “Si Mimas tiene un océano, representa una nueva clase de pequeños mundos oceánicos ‘sigilosos’ con superficies que no delatan la existencia del océano”, dijo la autora del estudio Alyssa Rhoden, científica del Instituto de Investigación del Suroeste en Boulder, Colorado, en un comunicado.