A pesar de que ya se utilizan varias técnicas mejoradas, sólo el 10% de las huellas dactilares en la escena del crimen tienen la calidad suficiente para poder ser utilizadas en tribunales. La "nueva" técnica se basa en "etiquetas" químicas fluorescentes y funciona en superficies metálicas, lo que significa que podría ser utilizada en cuchillos, pistolas o casquillos de balas. Los detalles fueron descritos en el ciclo de conferencias Faraday Discussions en Durham. "No obstante el ADN, las huellas digitales siguen siendo la principal fuente de identificación en las investigaciones criminales", explicó a la BBC el profesor Robert Hillman, de la Universidad de Leicester. "Cuando alguien pregunta: ‘¿para qué necesitamos otro método si hemos estado haciendo esto desde hace un siglo?‘, nuestra respuesta es: ‘para ver el 90% que no obtenemos actualmente‘". Aunque la técnica actualmente sólo funciona con objetos metálicos, Hillman dijo que era "muy significativa" para la investigación forense -especialmente en crímenes violentos. Polvos y electricidad El enfoque clásico para mejorar la visibilidad de las huellas ocultas, o -para usar la correcta terminología forense- latentes, es aplicar un polvo de color que se adhiere al residuo aceitoso que deja la superficie del dedo. Esto proporciona entonces un contraste visual con la superficie subyacente. La nueva técnica para visualizar las huellas dactilares explota el hecho de que sus pliegues no conducen la electricidad. Así el material de la huella digital actúa como una plantilla, bloqueando una corriente eléctrica que se utiliza para depositar una película de color. La película es dirigida a las regiones de la superficie plana que queda entre los pliegues de una huella digital, creando de ese modo una imagen negativa de la impresión. Las sustancias que se utilizan son "electrocrómicas", lo que significa que cambian de un color a otro cuando se someten a una tensión eléctrica. Los investigadores dicen que la técnica es altamente sensible, ya que incluso pequeñas cantidades de residuos de aislamiento (sólo unas pocas millonésimas de un metro), pueden evitar que la capa de color se adhiera al metal por debajo. El resultado es que se requiere mucho menos residuo de huella digital que en otras técnicas. También -ya que se centra en las diferencias entre los pliegues de las huellas dactilares- se puede utilizar en combinación con las técnicas existentes, basadas en polvos. "En principio, nos permite tener dos bocados de la cereza", dijo Hillman. "Si un mecanismo no funciona, no se ha puesto en peligro el otro". Ventajas El equipo ha desarrollado esta técnica mediante la incorporación dentro de la película de lo que se conoce como moléculas de fluoróforo. Estas reemiten la luz de un tercer color cuando se exponen a una fuente de luz visible o ultravioleta (UV). Los investigadores afirman que la combinación de los enfoques electrocrómicos y fluorescentes proporciona una gama de colores mucho más amplia con la cual "colorear" sus películas. Verificaron que la técnica funcionaba con neutrones -partículas subatómicas sin carga eléctrica. Los investigadores utilizan neutrones que producen los reactores en el Instituto Laue-Langevin (ILL) y servicio de Isis en Grenoble, Francia, y Didcot, Reino Unido, respectivamente. Rob Barker, científico del ILL, dijo que "los neutrones son una herramienta ideal para la comprensión de lo que está pasando dentro de estos complejos sistemas". "Toda la tecnología para obtener estas imágenes fluorescentes ya está allí (en los laboratorios forenses)", le dijo Hillman a la BBC. "Si conseguimos que esto funcione más adelante, no tendremos que convencer a la gente de comprar grandes cantidades de equipos de imagen. Ya los tienen. "Eso tiene ventajas en los gastos y los científicos que realizan esta labor ya están familiarizados con ella, lo que significa que no tenemos que volver a entrenar a una fuerza de trabajo", concluyó.