Es común pensar que la nariz congestionada es el resultado de tener demasiada mucosidad en las fosas nasales. Sin embargo, cuando esta situación se presenta es debido a la inflamación de vasos sanguíneos en los senos nasales.

Estos vasos irritados usualmente son activados por un resfriado, gripa, alergias o una infección sinusal, según información de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos. En estos casos, normalmente la congestión desaparece por sí sola en un tiempo promedio de una semana.

Sin embargo, también hay otras razones que se relacionan con la congestión nasal. Por ejemplo, la rinitis alérgica, el uso excesivo de algunas gotas o aerosoles nasales comprados sin una receta; los pólipos nasales, que son masas de tejido inflamado similares a sacos que recubren la nariz o los senos paranasales y la rinitis vasomotora, es decir aquella que no es alérgica.

Algunos de los síntomas más comunes que genera la congestión nasal incluyen, por ejemplo, molestias en la faringe, que normalmente es con lo que empieza el malestar. Posteriormente, aparece la congestión en la nariz, acompañada de líquido nasal claro, que luego puede volverse espeso y sucio.

En muchas ocasiones causa dificultades para respirar y descansar por la noche y, en general, afecta el bienestar del organismo; además, es posible que se presente secreción nasal excesiva (rinorrea), explica el sitio web Cinfasalud, de España.

El portal de salud Healthline plantea ocho formas para aliviar los síntomas generados por la nariz tapada, y son los siguientes:

1. Usar un humidificador: Esta máquina convierte el agua en humedad que llena lentamente el aire y respirar en este aire húmedo ayuda a ablandar los tejidos irritados y los vasos sanguíneos inflamados en la nariz. Los humidificadores también disuelven la mucosidad en los senos nasales.

2. Tomar una ducha caliente: El vapor de la ducha ayuda a disolver la mucosidad y a reducir la inflamación.

3. Mantenerse hidratado: Según Healthline es muy importante consumir muchos líquidos cuando la nariz está congestionada. Las bebidas ayudan a disolver la mucosidad en las fosas nasales, empujando los fluidos hacia afuera y disminuyendo la presión en los senos nasales. Menos presión significa menor inflamación e irritación.

4. Utilizar un aerosol salino: Mejorar la hidratación con una solución salina aumenta la humedad en las fosas nasales y ayuda a disolver la mucosidad, lo que disminuye la inflamación de los vasos sanguíneos y ayuda a vaciar los líquidos de la nariz.

5. Lavado nasal: La Dirección de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) recomienda usar agua destilada o esterilizada en lugar de la que se coge del grifo. Para realizarlo se coloca la boquilla del lavado nasal en una de las fosas y una vez que fluya el agua saldrá a través de la otra. Se realiza este proceso durante un minuto y posteriormente se cambia de lado.

6. Compresa tibia: Una compresa tibia puede ayudar a descongestionar al abrir las fosas nasales desde afuera. Para prepararla, primero se moja una toalla en agua tibia. Se exprime, luego se dobla y se coloca sobre nariz y la frente. El calor proporciona alivio del dolor y ayuda a aliviar la inflamación.

7. Descongestionantes: Los medicamentos descongestionantes ayudan a reducir la inflamación y a minimizar el dolor relacionado con las fosas nasales irritadas. Una de las recomendaciones es no tomar un descongestionante por más de tres días sin la supervisión de un médico.

8. Antihistamínicos o medicamentos para la alergia: Estos medicamentos pueden funcionar si la causa de la congestión es resultado de una reacción alérgica. Ambos tipos ayudan a reducir la inflamación en las fosas nasales, ayudando en el proceso de descongestión.