Cuidar la salud del cerebro es un acto responsable con la vida. Esto porque se trata del órgano más funcional, sin desmeritar al resto que conforma a todo el organismo.
Teniendo en cuenta consideraciones del Instituto Mexicano del Seguro Social, el cual es parte del gobierno ese país centroamericano, el cerebro coordina todo lo que una persona hace. Por ende, su cuidado debe ser constante.
Para ello, los expertos médicos recomiendan la alimentación saludable, el ejercicio regular, dormir adecuadamente, la estimulación cognitiva, evitar golpes craneales y mantener una red de apoyo familiar y social.
No obstante, los anteriores consejos no siempre se cumplen a cabalidad y en cuando comienzan a hacerse notorios las complicaciones en el cerebro.
Precisamente, un grupo de estudio se puso en la tarea de determinar uno de los hábitos más comunes que perjudica el rendimiento de las actividades cotidianas, pero también impacta severamente a la parte superior del cuerpo hasta el punto en el que hace que el cerebro se devore a sí mismo.
La investigación titulada Efectos ultraestructurales del sueño y la vigilia sobre las sinapsis de fibras paralelas del cerebelo, de la Universidad Politécnica de Marche, Italia, hizo el análisis sobre el impacto negativo que tiene el hábito de dormir poco o, en el peor de los casos, no dormir por completo.
Cuando no hay una cultura de sueño, resulta que puede que el cerebro devore a sí mismo sus neuronas y conexiones sinápticas, según el aval científico.
De igual modo, se indica que lo peor no solo recae en el hecho de que el cerebro se devore, pues, junto a esto, aunque se tome la iniciativa de mejorar el hábito de no dormir bien, es irreversible que el cerebro haga el proceso de fagocitosis, el cual permite que el imprescindible órgano de vida limpie y renueve subproductos tóxicos neuronales.
Aunque ya había información al respecto, el grupo de estudio dice que no se había abordado con base en la acción de no dormir.
Entonces, para dar con este tipo de resultados, se tuvo que recurrir a la ayuda de ratones. Los roedores fueron divididos en cuatro grupos: descanso normal, dormir ocho horas, dormir un día sí y el otro no y, por último, no dormir nada.
Así fue como el investigador Michele Bellesi, determinó que no dormir puede, entre las posibilidades más descabelladas, ser beneficioso, pero, aun así, el cerebro se devora a sí mismo. Las consecuencias a largo plazo de esto podrían ser drásticas, hasta desarrollar el riesgo de sufrir Alzheimer y otros trastornos.
¿Qué pasa si el cerebro se devora?
De acuerdo con Bienestar 180, cuando no se duerme bien y, por ende, puede que el cerebro se devore a sí mismo, uno de los daños más relevantes es el del deterioro neurológico, que puede ser un desencadenante certero en el cambio de emociones y carácter.
En la misma línea, las actividades diarias se ven truncadas, iniciado por la simplicidad de caminar. Finalmente, otro de los aspectos de la salud que puede desarrollarse son obesidad, diabetes y enfermedades del corazón y vasos sanguíneos.
Referencias
- Importancia de la salud cerebral. Instituto Mexicano del Seguro Social.
- Efectos ultraestructurales del sueño y la vigilia sobre las sinapsis de fibras paralelas del cerebelo. Research gate.
- Científicos descubren que por no dormir bien el cerebro se devora a sí mismo. Bienestar 180.