El herpes zóster, o como también se le conoce culebrilla, “es una erupción de sarpullido o ampollas en la piel”, que, de acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (MedlinePlus), tiene una correlación con el virus varicela-zóster.

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), a través del doctor Gerardo Medina Gálvez, coordinador de Programas Médicos de la Dirección de Prestaciones Médicas, señala que el herpes zóster aparece y desaparece porque el virus “queda alojado en el tejido nervioso” y cuando el cuerpo está en estado de inmunodepresión, activa este tipo de herpes (brote), que cabe recordar inicia en la infancia con el desarrollo de la varicela.

“La mayoría de las personas que presentan culebrilla tienen un solo episodio en la vida. Sin embargo, usted puede tener culebrilla más de una vez”, señalan los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Asimismo, afirman que “puede causar complicaciones graves que afectan los ojos, incluida la ceguera”.

La Biblioteca explica que aunque no es una afección contagiosa, sí puede propiciar el desarrollo de varicela, siempre y cuando una persona nunca haya tenido la enfermedad ni tampoco se haya vacunado. Aunque uno de los factores que inciden en su aparición se relaciona con la edad, menciona que a partir de los 50 años es común observar personas con culebrilla.

Así como el herpes es una consecuencia de la varicela, también se desarrolla por algunos tipos de cáncer, y enfermedades como el sida y el VIH.

Es entonces que muchos son los síntomas posibles de esta afección, tales como fiebre, dolores de cabeza, escalofríos, dolor abdominal, entumecimiento en un lado de la cara y el cuerpo, entre otros. Se recomienda consultar con un médico antes de someterse a tratamientos caseros.

La fiebre o escalofríos puede ser un síntoma de leucemia. Foto: Getty Images. | Foto: Foto: Getty Images.

El estrés y el herpes zóster

El IMSS manifiesta que el estrés es el causante de la aparición de herpes zóster y de otro tipo de brotes, por lo que recomienda controlar las emociones y mantener una salud mental estable, para que esta enfermedad no sea agresiva o quizá, no aparezca.

Medina Gálvez considera que es una enfermedad que se puede controlar, calificándola como “benigna”. Sin embargo, en algunos casos puede ser tan grave que incluso afecta el cerebro, provocando una encefalitis viral que es la hinchazón o inflamación del cerebro causada por un virus o una bacteria que en algunos casos se considera leve y en otros, grave.

Lo mismo que ocurre con el estrés causante de herpes, lo puede hacer la fatiga severa y la ansiedad, por ejemplo. Es importante tener presente que esta enfermedad dura entre 3 a 5 semanas.

Los laboratorios tienen un nuevo proyecto común de vacuna de ARN mensajero (ARNm), contra el zóster varicela, conocido popularmente como 'culebrilla'. | Foto: Getty Images

¿Qué es el estrés?

MedlinePlus precisa que el estrés es la respuesta del cuerpo ante una situación que representa una exigencia que puede provocar palpitaciones cardíacas, hipertensión o una irregularidad en los niveles de azúcar.

Asimismo, puede afectar el comportamiento de una persona y su productividad laboral, teniendo en cuenta que gran parte de la población mundial se ve afectada a diario, convirtiéndolo en un estilo de vida.

Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS), indica en una guía ilustrativa que el estrés puede provocar conflictos con el entorno, generando amenazas en la comunidad y poniendo en riesgo la vida de una persona.

Un estudio evaluó los límites al emplear el deporte como salida para aliviar el estrés y la ansiedad. | Foto: Getty Images / Guido Mieth
¿Cómo manejar el el estrés?

Todas las personas pueden experimentar frecuentemente estrés, pero existen hábitos que lo pueden contrarrestar, entre ellos:

  • Las actividades físicas no solo ayudan a fortalecer la estructura ósea o muscular del cuerpo, sino que contribuye en la salud mental, combatiendo, a su vez, múltiples problemas, que pueden afectar la calidad de vida de una persona.
  • La relación con familiares y amigos es fundamental, por lo que no solo reduce el estrés, sino combate otros problemas como la baja autoestima, por ejemplo.