Alimentarse de manera equilibrada es la mejor opción para mantener un organismo saludable. Muchas veces, al consumir alimentos no hay conocimiento suficiente de sus contenidos nutricionales, calorías, cantidades de sodio o azúcar y por ello se puede incurrir en el consumo de productos que poco aportan al bienestar de las personas.

Información del Ministerio de Salud y Protección Social indica que una dieta saludable es aquella que proporciona los nutrientes que el cuerpo necesita para mantener el buen funcionamiento, conservar o restablecer la salud, minimizar el riesgo de enfermedades, garantizar la reproducción, gestación, lactancia, desarrollo y crecimiento adecuados.

Para lograrlo y evitar complicaciones adversas como el sobrepeso o la obesidad, es necesario el consumo diario de frutas, verduras, cereales integrales, legumbres, leche, carnes magras, aves y pescado y aceite vegetal en cantidades adecuadas y sanas para el organismo.

El placer de comer puede, si se hace en exceso y de forma poco saludable, convertirse problema difícil de vencer y más si se generan adiciones a determinados productos. Hay evidencia científica que indica que la comida puede crear adicción de la misma forma en la que lo hacen las drogas, precisa un artículo publicado en el diario La Vanguardia, de España.

Una publicación del portal Cuerpo Mente, escrita por la fisoterapeuta Claudina Navarro, indica que hasta el 20 % de las personas experimenta una adicción a la comida, según un estudio realizado por la Universidad de Newcastle, Reino Unido y publicado en la revista Nutrients. Esta proporción es aún mayor entre las personas que tienen problemas de obseidad.

“La adicción a la comida se produce por los mismos mecanismos cerebrales de placer y recompensa que actúan con las “drogas”. Quienes tienen adicción a la comida informan que no pueden controlar su consumo de ciertos alimentos”, afirma la citada fuente.

En el listado de estos productos que generan adicción se encuentran, entre otros, los siguientes y se caracterizan por altas cantidades de azúcares y grasas.

Pizza

Este alimento contiene una importante proporción de grasas saturadas y carbohidratos, que generan una gran dependencia. Al favorecer la liberación de la dopamina (hormona del placer), hace que se sienta gusto y felicidad al consumirlo, precisa el portal Mejor con Salud, en un artículo escrito por la psicóloga Raquel Aldana.

Chocolate

Los chocolates comerciales están elaborados con elevados niveles de azúcar y grasas, por lo que su potencial adictivo es muy alto. El cacao en sí es bueno para el organismo, pero el problema radica cuando se le añaden elementos refinados en exceso, razón por la que se deben cuidar las dosis para evitar complicaciones de salud.

Papas fritas

En algunos casos esos alimentos contienen potenciadores del sabor que incrementan sus caracterpisticas adictivas, así como una importante cantidad de sal. Además, las grasas con las que están elaboradas suelen ser poco saludables.

Hamburguesas con queso

Estos alimentos combinan la grasa saturada de la carne con la del queso, precisa Cuerpo Mente. Una opción más saludable pueden ser hamburguesas veganas, especialmente si se preparan en casa con ingredientes naturales.

Refrescos y zumos

Estas bebidas se caracterizan por una alta concentración de azúcares, que las hacen muy adictivas. Lo mejor para hidratar el organismo siempre será el consumo de agua pura.

Pasteles

Tienen una alta concentración de azúcar y grasas. Además, su azúcar se absorbe en la sangre de manera más rápida, precisa Cuerpo Mente.

Palomitas de maíz

Son carbohidratos de absorción rápida, más grasa saturada, una combinación poco recomendable para la salud del organismo. Además, las que vienen en bolsas listas para el microondas pueden generar mayor adicción.

Cereales para el desayuno

Estos alimentos contienen importantes niveles de azúcar. “Además este tipo de cereales se encuentran entre los alimentos más ricos en acrilamidas, sustancias cancerígenas que se crean cuando los alimentos que contienen el aminoácido asparagina se calientan a altas temperaturas en presencia de algunos azúcares”, concluye Cuerpo Mente.