Para hidratar los ojos es necesario producir una cantidad de lágrimas suficiente. El lagrimear, ayuda a mantener húmedos los ojos previniendo el ojo seco, una afección que, aunque no suele ser grave, produce incomodidades.

Los ojos secos suelen ser más comunes con el pasar de los años y puede presentarse debido a distintos cambios hormonales que disminuyen la producción de lágrimas, así lo explica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Entre los síntomas de esta afección, listados por el Instituto Nacional del Ojo del mismo país, están el tener una sensación frecuente de aspereza, ardor constante en los ojos, enrojecimiento ocular, sensibilidad a los rayos fuertes de luz y, en ocasiones, visión borrosa.

En cuanto a las causas del ojo seco están las largas exposiciones al sol, usar lentes de contacto diariamente, el fumar o estar siempre cerca a alguien que lo haga, y frecuentar un ambiente o lugar seco.

El tratamiento varia dependiendo la persona que padezca la afección y la gravedad en la que esté. Además, solo el médico puede determinar cual es el más adecuado. Es posible acceder a gotas para los ojos, medicamentos especiales recetados, hacer cambios en el estilo de vida, etc.

Así mismo, el portal especializado en salud Healthline dio algunos consejos con los que es posible lubricar y evitar la resequedad ocular naturalmente:

1. Usar un humificador: como se dijo anteriormente, un ambiente seco puede provocar ojo seco, por lo que es posible usar un objeto como este para humedecer un poco el entorno.

2. Masajear los párpados: con las yemas de los dedos se pueden hacer pequeños masajes en los párpados hasta sentir alivio y producción de lágrimas.

3. Hidratar el cuerpo: hay que recordar que las lágrimas son agua, así que, si no se consume suficiente de este líquido, no habrá insumos suficientes para generarlas.

4. Evitar el viento: si se está expuesto el rostro a ráfagas de viento, es mejor usar gafas que aminoren el impacto del aire y se evite que se sequen las lágrimas que los lubrican.

5. Evitar las pantallas: cuando se sientan las molestias del ojo seco es mejor alejarse un poco de los dispositivos como el computador o el celular. Durante ese espacio, se aconseja parpadear en repetidas ocasiones para promover las lágrimas.

6. Aplicar compresas: los síntomas molestos de esta patología pueden aminorarse poniendo compresas de agua tibia. Se pueden dejar allí y remojar en agua tibia repetidas veces hasta sentir alivio.

Cabe resaltar que varios nutricionistas aseguran que la alimentación es una instancia importante para evitar esta afección, pues los alimentos tienen un efecto directo sobre la composición de la lágrima e inciden en calidad de la secreción de la película grasa.

Si esa capa de lípidos no está bien formada e hidratada, la lágrima se evapora rápidamente, produciendo el mal del ojo seco. De ahí la importancia de incorporar alimentos que contribuyan con la formación correcta de dicha película. Algunos de estos, son:

  • Alimentos ricos en omega 3: el consumo de este tipo de ácido graso es fundamental para el tratamiento de la sequedad ocular. El pescado, los frutos secos y el aceite de oliva, son algunos de los productos que lo contienen.
  • Vitaminas esenciales: las mejores vitaminas para los ojos son las vitaminas C, E y B. Estos poderosos antioxidantes favorecen la membrana de los párpados e inciden en la salud del cristalino. Los cítricos, los aceites vegetales y las legumbres, son de los más recomendados en este caso.