La artritis es la hinchazón y sensibilidad de una o más de las articulaciones. Sus principales síntomas son dolor y rigidez de las articulaciones, que suelen empeorar con la edad. Además, los tipos más frecuentes de esta enfermedad son la artrosis y la artritis reumatoide, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.

Sin embargo, hay otros tipos de artritis como artritis del pulgar, artritis idiopática juvenil, artritis psoriásica, artritis reactiva, artritis séptica, espondiloartritis anquilosante, gota y osteoartritis.

Además, los factores de riesgo de la artritis comprenden antecedentes familiares, la edad, sexo, lesión articular previa y obesidad.

Por tal razón, el portal Nuevas Evas reveló algunos alimentos que deben evitar las personas que padecen artritis:

1. Trigo.

2. Huevos.

3. Papas fritas.

4. Pan de molde.

5. Cubitos o saborizantes.

6. Chocolate.

7. Mermelada.

8. Pastelitos y galletas.

9. Leche.

10. Embutidos.

11. Gaseosas y jugos de caja.

No obstante, existen otros alimentos que sí son buenos, pues la Fundación de Artritis reveló en su portal web que, según Kim Larson, miembro de la Academia de Nutrición y Dietética, “mientras más alimentos antiinflamatorios y especias consuma la persona, mejor combate la inflamación crónica”. Además, añadió: “Creo que la gente a menudo se sorprende de la magnífica fuente de antiinflamatorios que pueden ser las especias”.

Por tal razón recomendó el ajo, ya que tiene compuesto antiinflamatorio y por ende ayuda a combatir el dolor la inflamación y el daño al cartílago en las personas con artritis.

La fundación también señaló que la cúrcuma es buena para la artritis, pues mejora el dolor y según la fundación, es más efectiva mezclada con pimienta negra, que ayuda a que el cuerpo la absorba mejor.

Asimismo, el jengibre, la canela y el chile en polvo son otras especias que ayudan a combatir los síntomas de la artritis, ya que ayudan a inhibir el daño celular y además, porque poseen propiedades antiinflamatorias.

De todos modos, antes de consumir algún alimento o dejarlo lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique que es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas.

Por su parte, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) revelaron que hay medidas que se pueden tomar para reducir el riesgo de tener algunos tipos de artritis como, por ejemplo, mantener un peso saludable reduce el riesgo de tener artrosis y gota. Además, proteger las articulaciones contra el uso excesivo y las lesiones puede reducir el riesgo de artrosis.

Asimismo, si la enfermedad ya está presente, especialistas recomiendan realizar actividad física, pues esto es una manera simple y eficaz de aliviar el dolor causado por la artritis sin el uso de medicamentos, ya que la actividad física puede mejorar la función, el estado de ánimo y la calidad de vida de los adultos que la padecen.

No obstante, Mayo Clinic reveló que si los métodos tradicionales no sirven, los médicos pueden sugerir una cirugía, como:

  • Reparación de la articulación. En algunos casos, las superficies articulares pueden repararse o realinearse para reducir el dolor y mejorar la función. Estos tipos de procedimientos suelen realizarse de manera artroscópica, a través de pequeñas incisiones en la articulación.
  • Reemplazo de la articulación. Este procedimiento consiste en extraer la articulación dañada y sustituirla por una artificial. Las articulaciones que se reemplazan con mayor frecuencia son las de caderas y las de rodillas.
  • Fusión de la articulación. Este procedimiento se utiliza más a menudo para las articulaciones más pequeñas, como las de la muñeca, el tobillo y los dedos. Se quitan los extremos de los dos huesos en la articulación y luego se fijan los extremos entre sí hasta que se curan y forman una unidad rígida.