Con el paso de los años, la estructura ósea comienza a debilitarse, lo que provoca que las personas sean más susceptibles a enfrentarse a fracturas, que se registran principalmente en la cadera, la muñeca o la columna vertebral, o sufrir de enfermedades como la osteoporosis, dicen los expertos.
La Sociedad Española de Reumatología (SER) menciona que la osteoporosis es una enfermedad esquelética en la que se produce una disminución de la densidad de la masa ósea; se estima que afecta a 2,5 millones de personas mayores de 50 años a nivel mundial.
Según el instituto de investigación Mayo Clinic, el hueso es un tejido vivo que se descompone y reemplaza constantemente. Sin embargo, a medida que la edad avanza, es posible que se genere osteoporosis, una afección en la que el surgimiento de hueso nuevo es más lento que la pérdida del viejo.
No obstante, el calcio no es el único nutriente clave para preservar la salud de la estructura ósea. También lo es la vitamina D, que le ayuda al cuerpo a absorber el calcio, según precisa la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
El magnesio, por su parte, cumple una función similar. Este es un mineral que interviene en procesos metabólicos claves para una adecuada salud ósea. Este nutriente se encuentra en frutos secos y semillas, así como en las legumbres.
Pues bien, un alimento que combina estos nutrientes y que pueden ayudar a las personas que sufren esta enfermedad, así como a prevenirla para quienes están a tiempo, es la gelatina. Según el medio Salud 180, este alimento también cuenta con colágeno, el mismo que apoya la reconstrucción del sistema óseo.
Según el portal mencionado, la gelatina es fuente de calcio, magnesio y fósforo, entre otros minerales y vitaminas que promueven el fortalecimiento de los huesos.
Otro de los beneficios de la gelatina por ser fuente de colágeno es su importante papel regenerador de cartílagos y ligamentos, según afirma una investigación realizada por la Universidad Yonsei (Corea del Sur). Se indicó que esto se presenta por la proteína indicada, la cual se encarga de reparar tejidos, huesos, tendones. Aporta aminoácidos esenciales, no tiene grasa ni colesterol.
La dieta para tener huesos saludables
Otro nutriente que no debe faltar es el silicio, porque el tejido conectivo y el hueso lo contienen. A partir de los 35 años se reducen sus niveles en el organismo, lo que provoca pérdida de colágeno y envejecimiento progresivo de piel, cabello, uñas, huesos, articulaciones y ligamentos, precisa el portal Saber Vivir.
Este compuesto químico se encuentra en productos como el aguacate, la cebolla, el plátano, el apio, el arroz, las espinacas, el perejil y el cilantro.
El azufre también es determinante, pues el cuerpo lo necesita para la síntesis del colágeno, componente esencial para la salud articular y ósea. Es posible encontrarlo en alimentos como carnes, pescados, huevos y lácteos. También se encuentra este mineral en vegetales como ajo, cebolla, puerro y crucíferas como el brócoli, la coliflor y las coles.
Un nutriente más es el fósforo, elemento esencial para la mineralización del hueso, por lo que se requiere un suministro adecuado a lo largo de la vida. Se halla en productos lácteos, carnes, nueces y semillas, legumbres y verduras.
En el caso de las vitaminas, la B12 activa los mecanismos para que los huesos se pongan fuertes. Se ha demostrado que unos niveles bajos de la misma aumentan el riesgo de osteoporosis, destaca Saber Vivir. Este nutriente puede obtenerse con el consumo de carnes magras, pescados y huevos.
Por su parte, la vitamina C contribuye a la salud de los huesos debido a que estimula la síntesis de colágeno en el organismo y esto puede dar firmeza, elasticidad y flexibilidad a las articulaciones, precisa la publicación digital española Vitónica. Este nutriente también favorece la absorción del calcio.