Luego de los 30 años, los huesos empiezan a sufrir algunos cambios y en algunos casos aparecen se vuelven más frágiles, por lo que es importante adecuar una dieta saludable desde temprana edad para no sufrir afecciones como la osteoporosis, una enfermedad que se caracteriza por la pérdida de densidad y calidad de los huesos, según indica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Por lo general, las personas que padecen de esta afección evidencian que los huesos se vuelven más porosos, se vuelven más delgados y frágiles, y resisten menos a los traumatismos, fracturándose con facilidad. De este modo, en la primera etapa de la osteoporosis no se presenta ningún tipo de sintomatología, pero a medida que avanza la afección se pueden presentar algunas señales como dolor de espalda, provocado por una vértebra fracturada; pérdida de estatura con el tiempo; una postura encorvada, según información del instituto de investigación clínica Mayo Clinic.

Esta enfermedad degenerativa debe ser tratada por un especialista de salud, que ofrecerá un tratamiento para aminorar los síntomas e ir mejorando la salud de los huesos. Frente a esto, la alimentación es un factor clave, ya que contienen nutrientes que no solo favorecen la composición ósea del organismo, sino que también ayudan a prevenir este tipo de afecciones.

La osteoporosis es una enfermedad que se caracteriza por la pérdida de densidad y calidad de los huesos. | Foto: GettyImages

De hecho, la revista Mejor con Salud destaca la importancia de consumir frutas saludables como los higos, un alimento que contiene una cantidad abundante de agua y nutrientes como el hierro, calcio, potasio, magnesio, cobre, flavonoides y vitaminas E, B, A y C. Específicamente, este superalimento al contener un alto contenido en calcio y ácido fólico, es muy recomendado para fortalecer los huesos, en especial, los de las mujeres.

El higo es una fruta que ayuda a reducir la presión arterial y a prevenir problemas cardiovasculares. | Foto: Getty Images

La revista en mención aconseja consumir los higos secos, ya que de esta forma el calcio por porción aumenta aún más. De este modo, la forma en la que se pueden consumir es por medio de un licuado que se debe consumir en horas de la mañana para tener mayor energía.

Licuado de higos

Ingredientes:

Preparación: inicialmente, se debe retirar la piel de los higos y luego colocarlos en la licuadora junto con el vaso de leche vegetal y la miel para procesarlos correctamente. Finalmente, consumir esta bebida cada mañana.

Otros beneficios de los higos

Combate el estreñimiento: como tal, las pequeñas semillas que se esconden en la pulpa de los higos son excelentes para el tránsito intestinal, pues actúan como un laxante suave que ayuda a combatir el estreñimiento.

Propiedades medicinales de la infusión de hojas de higo. | Foto: Getty Images

Equilibra la glucosa en sangre: el higo tiene un bajo índice glucémico, que determina qué tan pronto un alimento se descompone y se convierte en azúcar. Y otras fuentes muestran que el higo tiene una carga glucémica baja, un indicador que mide qué tanto sube el azúcar en el cuerpo después de consumir un alimento.

Ayuda a bajar de peso: por ser una fruta tan dulce y jugosa, puede parecer que tiene muchas calorías; sin embargo, si se consume fresco, su aporte calórico no es elevado (74 calorías en 100 gramos); no obstante, si se ingiere seco, las calorías pueden aumentar a 249 en la misma cantidad.

Protege la salud cardiovascular: por otro lado, los higos contienen cantidades importantes de omega-3 y 6 que, junto con el potasio, permiten combatir diferentes problemas de salud relacionados con el sistema cardiovascular. Por ejemplo, en los casos de hipertensión arterial, riesgo de ataque cardíaco o problemas coronarios, entre otros.