Con el paso de los años, varios órganos y partes del cuerpo se ven afectadas por el envejecimiento; por eso, los especialistas recomiendan llevar una dieta sana y equilibrada durante la mayor parte de la vida, como también es crucial realizar actividad física de manera frecuente y dormir, como mínimo, seis horas continuas durante la noche.
Una de las enfermedades más diagnosticadas durante esta etapa es la osteoporosis. Según explica la Biblioteca de Salud y Medicina de los Estados Unidos, Medlineplus, este padecimiento ocasiona que los huesos se vuelven frágiles y se corre el riesgo de que se rompan con mayor facilidad, “especialmente los de la cadera, espina vertebral y muñeca”.
La medida de prevención para evitar el padecimiento de esta enfermedad es consumir alimentos con un alto contenido de calcio y realizar actividad física a lo largo de la vida, que esté acorde con las condiciones físicas y de edad de cada paciente.
Esta enfermedad es silenciosa y la mayoría de individuos solo se da cuenta de que la padece cuando sufre alguna fractura en alguno de sus huesos. El medio especializado en salud aclara que este padecimiento puede ser diagnosticado en cualquier paciente y a cualquier edad; sin embargo, es más frecuente en las mujeres de avanzada edad o en pacientes que cumplan algunos de estos condicionamientos.
- Avanzada edad.
- Ser de talla pequeña y delgada.
- Tomar ciertos medicamentos.
- Ser mujer de raza blanca o asiática.
- Tener baja densidad ósea.
Así las cosas, los huesos almacenan minerales tales como el calcio y el fósforo, los cuales ayudan a que se mantengan fuertes. Así mismo, los liberan a otros órganos cuando estos los necesitan.
Teniendo en cuenta la importancia del sistema óseo para el ser humano, es de vital importancia cuidar su salud. El NIH destaca que existen varias cosas que se pueden hacer para mantener los huesos sanos y fuertes, en ese sentido, hace una mención especial a la alimentación.
“Consumir alimentos ricos en calcio y vitamina D, hacer suficiente ejercicio y tener hábitos saludables ayuda a mantener los huesos sanos”, precisa el NIH.
En ese orden de ideas, advierte que no comer bien y no hacer suficiente ejercicio incrementa el riesgo de que los huesos se debiliten y, eventualmente, se rompan. Vale mencionar que una fractura puede causar dolor intenso y, en ocasiones, requiere cirugía para su reparación.
La enciclopedia médica MedlinePlus reseña que el calcio es un mineral que ayuda a los músculos, nervios y células a funcionar normalmente. Adicionalmente, resalta que el cuerpo necesita calcio y fósforo para mantener los huesos en óptimo estado.
En vista de que el cuerpo no puede producir calcio, la principal fuente de este nutriente es la alimentación o suplementos. “Si el cuerpo no absorbe suficiente calcio, los huesos se pueden debilitar o no crecer apropiadamente”, indica la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
El NIH recomienda consumir una dieta bien balanceada y rica en calcio y vitamina D. “Las buenas fuentes de calcio incluyen productos lácteos bajos en grasa y alimentos y bebidas con calcio agregado. Buenas fuentes de vitamina D incluyen yemas de huevo, pescado de mar, hígado y leche con vitamina D agregada. Algunas personas pueden necesitar suplementos nutricionales para obtener suficiente calcio y vitamina D”, expone en su sitio web.
Estas son algunas fuentes naturales de calcio:
- Tofu (fortificado con calcio).
- Leche de soya (fortificada con calcio).
- Verduras de hojas verdes (por ejemplo, brócoli, coles de Bruselas, hojas de mostaza, col rizada).
- Col o repollo chino (o “bok choy”).
- Frijoles o legumbres.
- Tortillas.
- Sardinas o salmón con huesos comestibles.
- Camarones.
- Jugo de naranja (fortificado con calcio).
- Pan.
- Nueces o almendras.
- Productos de leche (leche, queso, yogur).