La enfermedad de Parkinson es una enfermedad progresiva del sistema nervioso que afecta el movimiento, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Asimismo, explicó que los signos y síntomas del párkinson pueden ser diferentes para cada persona y que los primeros signos pueden ser leves y pasar desapercibidos. A menudo, los síntomas comienzan en un lado del cuerpo y usualmente continúan empeorando en ese lado, incluso después de que los síntomas comienzan a afectar ambos lados.
Estos síntomas son:
- Temblores. Un temblor, o una sacudida, generalmente comienza en una extremidad, a menudo en la mano o los dedos. Este movimiento puede hacer frotar el pulgar y el índice de un lado a otro, lo que se conoce como temblor de la píldora. La mano tiende a temblar cuando está en reposo.
- Lentitud en los movimientos (bradicinesia). Con el tiempo, la enfermedad de Parkinson puede retardar los movimientos, haciendo que las tareas simples sean difíciles y lleven más tiempo. Puede que los pasos sean más cortos cuando se camina y resulta difícil levantarse de la silla o que se arrastren los pies mientras se intenta caminar.
- Rigidez muscular. La rigidez muscular puede ocurrir en cualquier parte del cuerpo. La rigidez muscular tiende a dolor y limita la amplitud de movimiento.
- Alteración de la postura y el equilibrio. La postura se encorva y pueden presentarse problemas de equilibrio como consecuencia de la enfermedad de Parkinson.
- Pérdida de los movimientos automáticos. Es posible que se reduzca la capacidad para realizar movimientos inconscientes, como parpadear, sonreír o balancear los brazos al caminar.
- Cambios en el habla. Se puede hablar suavemente, rápidamente, insultar o dudar antes de hablar. El habla se presenta en un solo tono en lugar de tener las inflexiones habituales.
- Cambios en la escritura. Cada vez resulta más difícil escribir y tu letra puede parecer pequeña.
No obstante, el portal Salud 180 reveló que existen otros síntomas que son menos comunes, como problemas digestivos, pérdida del olfato, trastornos del sueño y problemas de la piel.
Hay que señalar que debido a que se desconoce la causa de la enfermedad de Parkinson, las maneras probadas para prevenirla también son un misterio.
No obstante, la entidad sin ánimo de lucro reveló que en algunas investigaciones se ha demostrado que el ejercicio aeróbico regular podría reducir el riesgo de tener párkinson.
Asimismo, explicó que en algunas otras investigaciones se ha demostrado que las personas que consumen cafeína, que se encuentra en el café, el té y las bebidas de cola, contraen la enfermedad de Parkinson con menos frecuencia que las que no lo hacen. El té verde también está relacionado con un riesgo menor de tener la enfermedad de Parkinson.
Sin embargo, aún se desconoce si la cafeína en realidad previene el párkinson, o si está relacionada en algún aspecto. En la actualidad, no existe evidencia suficiente para indicar que el consumo de bebidas con cafeína tenga un efecto protector contra la enfermedad.
De acuerdo con los neurólogos, estas son las pautas de alimentación que necesita seguir un paciente con enfermedad de Parkinson:
En la dieta de estos pacientes se deben restringir o limitar las carnes ricas en grasas como el pato, cerdo y ternera; las carnes curadas o ahumadas, charcutería como los patés y salchichas; los pescados adobados y las vísceras; las frutas escarchadas; las bebidas alcohólicas y estimulantes como el café; el aceite de coco, el tocino, las comidas rápidas y los dulces de repostería rellenos o todos aquellos que sean azucarados.
Los lácteos también deben restringirse debido a su gran contenido de grasas. Lo ideal es evitar los quesos, el yogur y la leche.