El azúcar o glucosa en la sangre es una sustancia que el cuerpo requiere para tener energía. Sin embargo, sus niveles elevados pueden causar diversas afecciones de salud. La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos asegura que a esta afección se le conoce como hiperglicemia.

El azúcar alto en la sangre casi siempre ocurre en personas que tienen diabetes y se produce cuando el cuerpo genera muy poca insulina o no responde a la señal que esta hormona envía. La insulina es una hormona que ayuda al cuerpo a mover la glucosa desde la sangre hacia el músculo o grasa, donde se almacena para usarla posteriormente, cuando el organismo requiere energía.

A veces el azúcar alta en la sangre se presenta debido al estrés causado por una cirugía, infección, traumatismo o medicamentos. Luego que el estrés termina, regresa a la normalidad.

Las personas que presentan niveles elevados de glucosa en la sangre, generalmente padecen diabetes. | Foto: Getty Images

Si el azúcar está elevado, es posible que el cuerpo lo informe a través de los siguientes síntomas:

  • Estar muy sediento o tener la boca seca.
  • Tener visión borrosa.
  • Sentirse débil o cansado.
  • Sentirse débil o cansado

En caso de tener el azúcar elevado, pueden seguirse algunos pasos específicos con los que es posible mantenerlo bajo control. Estas son algunas de las recomendaciones de los expertos para hacerle frente a esta afección.

La diabetes es una enfermedad que puede afectar muchos órganos del cuerpo. | Foto: Nora Sahinun

Alimentación saludable

Especialistas de la Clínica Mayo indican que la alimentación saludable es la piedra angular de una vida sana, con o sin diabetes. Pero si se tiene el azúcar elevado en la sangre, es importante no solo tener en cuenta el tipo de comida que se consume, también cuánto se come y las combinaciones de tipos de comida. Para ello es importante que el médico tratante indique la dieta y los medicamentos adecuados dependiendo de la condición de paciente.

Ejercicio

La práctica de actividad física es otro aspecto fundamental en el plan de control de la glucosa en la sangre. Cuando la persona realiza ejercicio, los músculos utilizan el azúcar (glucosa) para obtener energía. La actividad física regular también ayuda al cuerpo a usar la insulina de manera más eficiente.

De acuerdo con los expertos, estos factores trabajan juntos para reducir el nivel de glucosa en la sangre. Cuanto más vigoroso sea el ejercicio, más tiempo durará el efecto. Incluso las actividades livianas, como las tareas domésticas, la jardinería o estar de pie durante largos periodos, pueden mejorar el nivel de azúcar.

Bajarle al alcohol

El hígado normalmente libera el azúcar almacenado para contrarrestar la caída de los niveles de glucosa en la sangre. Pero si este órgano se encuentra metabolizando el alcohol, es posible que el nivel de glucosa en la sangre no reciba la señal hepática que necesita. El alcohol puede provocar un bajo nivel de glucosa en la sangre poco después de beberlo y hasta 24 horas después, precisa Clínica Mayo.

La diabetes puede controlarse con una alimentación saludable. | Foto: © Andriy Onufriyenko

Dejar de fumar

Abstenerse de fumar es especialmente importante para las personas con diabetes porque tanto este hábito como la diabetes reducen el diámetro de los vasos sanguíneos. Según los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, el estrechamiento de estos conductos hace que el corazón tenga que trabajar más duro. Los cigarrillos electrónicos tampoco son buenos.

Cuando una persona deja de fumar puede disminuir su riesgo de que se presente un ataque al corazón, accidente cerebrovascular y enfermedades de los nervios y los riñones. De igual forma, es una buena estrategia para mejorar el colesterol y la presión arterial, así como la circulación sanguínea y es más fácil mantenerse físicamente activo.

Referencias:

Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos

Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos

Clínica Mayo