Una alimentación saludable ayudará a prevenir enfermedades no trasmisibles, entre ellas la diabetes, las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares y el cáncer, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Asimismo, hay batidos que ayudan a tener una buena salud y por ello, el periódico Mundiario reveló que la mezcla de pepino y piña ayuda a limpiar el colon y a perder peso, ya que tiene propiedades diuréticas, antioxidantes, desinflamatorias, entre otras.

Así las cosas, para preparar el batido hay que licuar medio pepino, una rodaja de piña y una manzana verde. Después, cuando se consiga una mezcla homogénea, se consume y, preferiblemente, en ayunas.

No obstante, la bebida no reemplazará el desayuno, ya que solo es un complemento y por ello, se debe tener una alimentación saludable que incluya proteínas, grasas, carbohidratos, frutas, verduras y todos los nutrientes que el cuerpo necesita.

De hecho, la OMS explicó que una dieta sana incluye lo siguiente:

  • Frutas, verduras, legumbres (tales como lentejas y alubias), frutos secos y cereales integrales (por ejemplo, maíz, mijo, avena, trigo o arroz moreno no procesados).
  • Menos del 10 % de la ingesta calórica total debe proceder de azúcares libre, que equivale a 50 gramos (o unas 12 cucharaditas rasas) en el caso de una persona con un peso corporal saludable que consuma aproximadamente 2.000 calorías al día, aunque para obtener beneficios de salud adicionales lo ideal sería un consumo inferior al 5 % de la ingesta calórica total.

Además, explicó que los azúcares libres son todos aquellos que los fabricantes, cocineros o consumidores añaden a los alimentos o las bebidas, así como los azúcares naturalmente presentes en la miel, los jarabes y los zumos y concentrados de frutas.

  • Menos del 30 % de la ingesta calórica diaria procedente de grasas. Las grasas no saturadas (presentes en pescados, aguacates, frutos secos y en los aceites de girasol, soja, canola y oliva) son preferibles a las grasas saturadas (presentes en la carne grasa, la mantequilla, el aceite de palma y de coco, la nata, el queso, la mantequilla clarificada y la manteca de cerdo), y las grasas trans de todos los tipos, en particular las producidas industrialmente (presentes en pizzas congeladas, tartas, galletas, pasteles, obleas, aceites de cocina y pastas untables), y grasas trans de rumiantes (presentes en la carne y los productos lácteos de rumiantes tales como vacas, ovejas, cabras y camellos).

“Se sugirió reducir la ingesta de grasas saturadas a menos del 10 % de la ingesta total de calorías, y la de grasas trans a menos del 1 %. En particular, las grasas trans producidas industrialmente no forman parte de una dieta saludable y se deberían evitar”, añadió la OMS.

  • Menos de 5 gramos (aproximadamente una cucharadita) al día. La sal debería ser yodada.

Sobre la misma línea, es importante consumir agua, aunque de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, el consumo diario de agua es diferente para los hombres y para las mujeres, ya que existen diferencias entre la ingesta, pero por lo general los hombres deberían consumir 3,7 litros de agua al día y las mujeres deberían beber 2,7 litros.

De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.