Quienes planean bajar de peso deben gastar más calorías de las que consumen. Para muchas personas conseguir adelgazar no es solo una cuestión estética, sino de salud. Además, es un proceso que requiere paciencia y constancia.
Es importante mantener un peso acorde a la estatura y contextura, ya que el sobrepeso y la obesidad pueden ocasionar el desarrollo de enfermedades crónicas. Según expertos, el control de peso radica en lograr un equilibrio entre la cantidad de calorías que se consumen con la cantidad de calorías que el cuerpo quema.
La mejor forma para lograr este objetivo es ir modificando los hábitos y estilos de vida que ya se tienen. Entre estos, es indispensable hacer ejercicio regularmente y seguir una alimentación balanceada que permita alcanzar el peso ideal.
Si se sigue lo anterior, el cuerpo logrará prevenir el surgimiento de patologías que afecten la vida cotidiana de una persona debido a su peso. Además, se puede recurrir a algunas dietas recetadas por el especialista que estimulan la quema de grasa en el organismo.
El problema, para muchas personas, radica en mantenerse en el peso ideal después de haber perdido una gran cantidad de kilos después de jornadas de alimentación y de ejercicio que resultaron beneficiosas para el cuerpo.
Para prevenir lo mencionado, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), dio una serie de consejos para preservar este logro que probablemente beneficiará la salud presente y futura:
Cuidar la alimentación
1. Mantener constantes los patrones de alimentación: independientemente de los cambios en la rutina diaria, hay que mantener un patrón de alimentación. Por ejemplo, se aconseja planificar las comidas con anticipación para incluir alimentos saludables.
2. Seguir un patrón de alimentación saludable y realista: es importante mantener los hábitos alimenticios saludables adquiridos durante la dieta. En estudios citados por los CDC, las personas que lograron mantener su peso, tuvieron una dieta con bajos carbohidratos.
3. Desayunar todos los días: si es la comida más importante del día, pues es lo que recibe el organismo después de muchas horas de quietud. Un desayuno saludable puede ayudar a evitar hambre a lo largo del día.
Mantenerse activo
Si una persona quiere sentirse bien, tener más energía y hasta agregar años a su vida, uno de los principales aspectos que debe tener en cuenta es la realización de actividad física de manera regular, dicen los especialistas.
Información del instituto de investigaciones Mayo Clinic indica que todas las personas se benefician del ejercicio, sin importar la edad, el sexo o la capacidad física.
Por ejemplo, realizar actividad física puede ayudar a prevenir el aumento de peso o a mantener un peso saludable y para ello no se requiere de ir al gimnasio. Cualquier cantidad de actividad es mejor que ninguna y solo las tareas de la vida cotidiana ayudan.
Mantener el curso
1. Vigilar el peso: se aconseja mantener un registro del peso que se tiene con el fin de planificar la alimentación o la actividad física dependiendo si se sube o se baja de peso. Al tomar este consejo, se pueden corregir tendencias saludables o no rápidamente.
2. Vigilar la alimentación y su actividad: hay que coordinar las actividades diarias con la alimentación y el ejercicio. Por ejemplo, para aquellas que personas viajan con frecuencia, pueden hacer ejercicio en el gimnasio del hotel o al aire libre.
3. Buscar apoyo de familiares, amigos y otras personas: es necesario que algunas personas apoyen al individuo que está en este proceso. El entorno, en ocasiones, ayuda a superar los tropiezos que se puedan tener a lo largo del proceso.