El pescado es una proteína magra y saludable que contiene un tipo de grasa llamada omega-3 y ácidos grasos que protegen el corazón, según Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
“Las personas que consumen pescado y otros mariscos corren un menor riesgo de presentar varias enfermedades crónicas. Sin embargo, no está claro si estos beneficios para la salud vienen simplemente por comer estos alimentos o del omega-3 en estos”, señaló el Instituto Nacional de Salud (NIH, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Además, una deficiencia de omega-3 puede causar piel áspera, escamosa y erupciones cutáneas, con enrojecimiento, hinchazón y picazón.
¿Cuánto pescado se debe comer?
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los Estados Unidos recomienda el pescado como parte de una dieta saludable para la mayoría de las personas, pero las mujeres embarazadas, que planean quedar embarazadas o que están amamantando, y los niños pequeños deben evitar comer pescado con el potencial de altos niveles de contaminación por mercurio.
- Los adultos deben comer por lo menos 8 onzas (226,80 g) o dos porciones de pescado rico en omega 3 a la semana. El tamaño de la porción es de 4 onzas (113,40 g) o aproximadamente el tamaño de una baraja de cartas.
- Las mujeres embarazadas, que planean quedar embarazadas o que están amamantando deben comer hasta 12 onzas (340,20 g) de mariscos por semana de una variedad de opciones que son más bajas en contaminación por mercurio.
- Los niños también deben comer pescado de opciones con menos mercurio una o dos veces por semana. El tamaño de la porción para niños menores de 2 años es de 1 onza (28,34 g) y aumenta con la edad.
Pero, para obtener los mayores beneficios para la salud de comer pescado, se debe prestar atención a cómo se prepara el alimento. Por ejemplo, asar el pescado a la plancha, a la parrilla o al horno es una opción más saludable que freírlo.
¿Existe alguna preocupación relacionada con el consumo de pescado?
Si se come suficiente pescado que contenga mercurio, la toxina puede acumularse en el cuerpo y aunque es poco probable que el mercurio cause problemas de salud para la mayoría de los adultos, es particularmente dañino para el desarrollo del cerebro y el sistema nervioso de los niños por nacer y de los niños pequeños.
Además, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, algunos estudios recientes han relacionado los altos niveles de ácidos grasos omega-3 en la sangre con un mayor riesgo de cáncer de próstata, pero otros estudios han sugerido que los ácidos grasos omega-3 podrían prevenir el cáncer de próstata.
De igual forma, reveló que ninguno de estos estudios fue concluyente, por lo que es necesario realizar más investigaciones.
Por ello, mientras tanto, al igual que con cualquier alimento que se quiera incluir en la dieta diaria, es importante consultar al médico tratante o a un nutricionista sobre cuál es la mejor manera de consumir, y si las condiciones médicas ya existentes no son un impedimento para beneficiarse de todas las propiedades del alimento ya nombrado.
Sobre la misma línea, algunos investigadores también están preocupados por el consumo de pescado producido en granjas en lugar de pescado capturado en el medio silvestre debido a los antibióticos, pesticidas y otras sustancias químicas utilizadas en la cría de peces de piscifactoría.
Sin embargo, la Administración de Alimentos y Medicamentos ha descubierto que los niveles de contaminantes en el pescado comercial no parecen causar efectos nocivos para la salud.