La piel es el órgano del cuerpo que ayuda a mantenerlo a temperatura adecuada, por lo que los expertos aconsejan mantener un cuidado permanente de la misma frente a agresiones externas.
Es importante tener en cuenta que existen varias clases de piel que deben ser cuidadas dependiendo de sus características que pueden ser: seca, grasa, mixta y delicada.
Uno de esos cuidados está relacionado la hidratación tanto dentro como fuera para lo cual se recomienda tomar dos litros de agua al día y aplicar algunos productos que hidratantes que se pueden conseguir en el mercado.
Pero además de esos cuidados, los expertos han advertido la necesidad de proteger la piel del sol, ya que una exposición permanente y por mucho tiempo puede provocar arrugas, manchas de la edad y otros problemas, así como un aumento del riesgo de cáncer. En este caso, lo más aconsejable es utilizar protector solar, incluso sin que el día esté soleado.
Igualmente, se debe limpiar manera adecuada, ya que de no hacerlo puede provocar sequedad, deshidratación o erupciones cutáneas, incluso hace que los poros se llenen de células cutáneas muertas.
Se aconseja exfoliarla una o dos veces por semana para suavizarla y eliminar todas las células muertas, con productos acordes al tipo de piel.
Otros de los factores que inciden negativamente en la salud de la piel son el tabaco, la contaminación, el estrés o la mala alimentación.
En el caso de la contaminación, los especialistas recomendaron limpiarla una vez la persona llegue a la casa con un producto adecuado. Este proceso debe hacerse así la persona se haya maquillado o no.
A esos cuidados se suma una buena alimentación, ya que a la falta de nutrientes, la piel se verá más apagada y pueden salir ciertas imperfecciones, como granos, por lo que se debe seguir una dieta equilibrada que debe estar acompañada de ejercicio.
La piedra de alumbre
La piedra de alumbre es un conocido mineral que está compuesto por aluminio y potasio, principalmente, que es usado frecuentemente como desodorante, ya sea en forma de polvos o de piedra.
Este es utilizado además para mantener aclarada la piel, ya que ayuda a desvanecer las manchas ligeras, siendo muy útil en la cosmética natural.
Debido a sus propiedades antimicrobianas, antisépticas y astringentes, así como a la ausencia de alcohol, perfumes y sustancias químicas tóxicas, cumple eficazmente con el propósito de purificar y curar la piel, así como para revitalizarla y mejorar su apariencia.
Adicionalmente, ayuda sanar las cicatrices, se utiliza como reafirmante o como loción para después del afeitado, así como anti acné. Igualmente, es un poderoso despigmentante capaz de eliminar y prevenir las manchas.
Precisamente, por sus agentes minerales, la lumbre aclara las zonas más oscuras del cuerpo, ya que contribuye a restaurar la condición de la piel.
Los expertos advirtieron, sin embargo, que su efectividad depende del tipo de manchas que se quieran atender, debido a que sus propiedades depurativas y aclarantes solo tienen efecto siempre y cuando el obscurecimiento cutáneo se trate un problema externo estético derivado de las malas prácticas diarias, y no del resultado de afecciones de la salud como un desbalance hormonal, diabetes u obesidad.
¿Cómo usarla?
No es un proceso complicado, solo se necesita que la persona moje un poco la piedra de lumbre con agua purificada, mineral o de rosas, y frotarla delicadamente sobre las áreas oscurecidas como axilas, codos y rodillas.
Igualmente, se puede triturarla hasta obtener un polvo fino, el cual se coloca en un atomizador con un poco de agua y se aplica rociando la piel. Se trata de un método más cómodo en el propósito de desmanchar la piel.
En todo caso y aunque este mineral puede ser efectivo para aclarar la piel, se aconseja consultar con un dermatólogo teniendo en cuenta que todas las pieles no responden igual a los tratamientos de origen natural.
Igualmente, se recomienda que hacer una prueba en una sección pequeña de la piel de manera que la persona tenga la certeza que la piedra de lumbre cause alguna alergia o irritación.