El acné es un trastorno de la piel que ocurre cuando los folículos pilosos se tapan con grasa y células cutáneas muertas causando puntos blancos, puntos negros o granos, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Además, explicó que algunos factores que pueden desencadenar o empeorar el acné son:
- Cambios hormonales. Los andrógenos son hormonas que aumentan en los jóvenes durante la pubertad y que hacen que las glándulas sebáceas se agranden y produzcan más sebo. Los cambios hormonales durante la madurez, especialmente en las mujeres, también pueden provocar brotes.
- Ciertos medicamentos. Los ejemplos incluyen medicamentos que contienen corticosteroides, testosterona o litio.
- Alimentación. Los estudios indican que el consumo de determinados alimentos, incluidos los alimentos ricos en carbohidratos, como el pan, los bagels y las papas fritas, puede empeorar el acné, pero se necesitan más estudios para evaluar si las personas con acné se beneficiarían con algunas restricciones específicas de alimentación.
- Estrés. El estrés no causa acné, pero, si ya se padece, puede empeorarlo.
Es fundamental encontrar el motivo por el cual la piel sufre de acné y así optar por un tratamiento que regule este problema. De acuerdo con la doctora Camila Pérez Madrid, médica dermatóloga y vocera de L’oréal, contó a SEMANA que una persona con tendencia a tener piel con acné, además debe elegir muy bien su limpiador facial y su maquillaje, pues estos pueden empeorar o mejorar la situación.
En ese sentido, la doctora aseguró que usar maquillaje ligero, especialmente bases ligeras, ayudarán a mejorar el acné. “Las pieles con tendencia a ser muy grasa puede usar bases ligeras o productos como BB Blur que son productos ideales para pieles con tendencia al acné”.
Además, recordó que siempre se debe hidratar la piel, sin importar que esta tenga tendencia grasa, además, usar bloqueador solar para evitar manchas por acné. Además, aseguró que se pueden añadir otros productos y herramientas en la rutina de cuidado de la piel que mejoren esta condición, Madrid aseguró que el ácido salicílico es excelente para combatir esta afección. No obstante, es necesario acudir a un dermatólogo que recomiende dichos productos de acuerdo con las necesidades de cada piel.
Por otro lado, también se puede añadir el uso o consumo de vitaminas que mejoren el aspecto de la piel, una de ellas es la vitamina A o retinol. De acuerdo con MedlinePlus, esta ayuda a:
- Mantener la salud de la piel.
- Contribuye con la prevención de enfermedades cardíacas.
- Participa en la unión de las proteínas transcriptoras del material genético.
- Mejora la función inmunitaria, contribuyendo con la maduración de las células T.
- Tiene propiedades antioxidantes, por lo que protege de los efectos de los radicales libres.
Además de estos beneficios, este nutriente ayuda a combatir el acné, el envejecimiento prematuro y reduce arrugas y líneas finas. Un estudio indica que el retinol tópico también ayuda a aumentar los niveles de colágeno, la proteína esencial en la estructura de la dermis.
¿Cómo usar la vitamina A o el retinol?
Existen varias formas de usar la vitamina A para combatir el acné. Mejor con Salud señala algunas de ellas:
- Dieta: es importante consumir alimentos ricos en este nutriente, de modo que los carotenoides se encuentran en frutas y verduras, sobre todo las que son de color verde, naranja o amarillo. Entre los que se aconsejan son zanahoria, calabaza, brócoli, melón, papaya y mango. Así mismo, se recomienda consumir alimento como la carne roja, los pescados y los lácteos.
- Suplementos orales: las personas con bajos niveles de vitamina A, pueden tener problemas que afectan la absorción de grasas, como la pancreatitis. De este modo, se aconseja consumir este tipo de suplementos para mejorar el aspecto de la piel.