La piel grasosa es el resultado de que las glándulas de grasa (sebaceas) produzcan demasiado aceite, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
La biblioteca también explicó que los genes y las hormonas juegan un papel clave en determinar si la persona tiene o no la piel grasosa. Además, según Medline Plus, la alimentación probablemente tiene muy poco que ver, si así fuera, con el hecho de tener o no piel grasosa.
Asimismo, lo más importante para mantener limpia la piel grasosa es usar agua caliente y jabón o un limpiador.
De igual forma, otra recomendación es utilizar té verde, pues este tiene propiedades antioxidantes y el primer consejo, según el portal de salud ‘Tododisca’, es realizar una mascarilla de té verde con vinagre de manzana y para hacerlo, solo se debe calentar una taza de té y añadir una cucharada de vinagre de manzana. En seguida, se aplica la mezcla en el rostro y se deja actuar por 15 minutos.
La segunda mascarilla es té verde con avena, pues esta mezcla apta para todo tipo de pieles, además de hidratar la piel, también elimina las células muertas y revitaliza. Para realizarla, se necesitan 15 gramos de té verde molido, 15 gramos de avena en hojuelas y 30 gramos de yogur natural. Estos productos se deben incorporar en un recipiente y se deben mezclar hasta obtener una pasta homogénea. Cuando esté lista, se debe aplicar por todo el rostro y cuello y dejarla actuar 20 minutos antes de enjuagar.
La tercera mascarilla es con té verde congelado y lo único que hay que hacer es meter la infusión de té a la nevera y, cuando esté fría, aplicar en el rostro por 15 minutos.
Asimismo, existen otras recetas caseras con té verde como, por ejemplo, té verde y miel de abejas orgánica. Esta mezcla es perfecta, según los expertos, porque la miel de abejas también es un potente antibacteriano que hidrata la piel y para realizarla se necesita una taza de agua de 100 ml y 1/2 taza de miel de abejas, 50 mg. Después, se debe introducir dos o tres bolsas de té verde en un recipiente con agua hirviendo y dejar actuar por tres minutos. Una vez transcurrido el tiempo, se deben retirar las bolsas y dejarlas enfriar con el fin de abrir y retirar las hojas. En seguida, en un bol se debe verter la miel junto con las hojas. Mientras se mezcla y se obtiene la consistencia, se debe agregar un poco del líquido preparado inicialmente. Una vez se haya conseguido la mezcla se debe agregar sobre el rostro limpio y dejar actuar por 15-20 minutos. Cuando haya acabado el tiempo se debe retirar la mascarilla con abundante agua.
Sobre la misma línea, el bicarbonato de sodio es uno de los ingredientes naturales que tiene un sinnúmero de usos, entre ellos, ayudar a tener una piel limpia y saludable, motivo por el que combinarlo con el té verde es ideal para minimizar el exceso de grasa en la piel.
Para prepararla solo se requiere de 15 g de té verde molido, 5 g de bicarbonato de sodio, 15 g de miel de abeja y agua. Una vez listos estos ingredientes, se debe proceder a moler las hojas de té verde y combinarlas con el bicarbonato de sodio y la miel. Si es necesario, se debe humedecer con un poco de agua hasta obtener una pasta espesa, explica Mejor con Salud.
Luego, se debe limpiar la superficie de la piel con un paño y procede a aplicar la mascarilla. Una vez puesta, se deben realizar suaves masajes circulares para exfoliar y limpiar los poros.
Pasados 10 o 15 minutos, se debe enjuagar con agua templada. y secar la cara suavemente con una toalla. Esta mascarilla según el sitio experto, se puede repetir 2 o 3 veces a la semana.