Con la llegada de las vacaciones de verano a los países del norte, durante los meses de junio, julio y agosto, la playa, el mar y las palmeras serán los lugares ideales para descansar, relajarse y disfrutar el tiempo con amigos o en familia, por todo el esfuerzo que se realizó durante el primer semestre del año.
La actividad turística en las islas del caribe estará muy marcada por la cantidad de foráneos que visitan las paradisiacas playas que estos lugares pueden ofrecer llevándose consigo un recuerdo muy satisfactorio. No obstante, a pesar de la diversión que caracteriza a las vacaciones, el cuidado de la salud debe ir de la mano para que esta época no se vea empañada por alguna anomalía que presente el cuerpo.
Una de las zonas del organismo que más se ve afectada en las vacaciones de verano es la piel. El órgano más grande del cuerpo humano es muy propenso a quemaduras, lesiones, contaminación ambiental y radiación, por lo que es indispensable tomar medidas preventivas para que la piel no se vea perjudicada en las vacaciones de mitad de año. A continuación algunas recomendaciones:
- La hidratación es fundamental para que la piel no se vea afectada por la cantidad de sol que recibe. Es recomendable dejar los cítricos de lado en esta época del año. La alimentación juega un papel importante al momento de cuidar la piel en donde no debe haber espacio para el alcohol ni los productos que presenten excesos de azúcar.
- Se debe evitar la exposición directa al sol en el intervalo entre 10 de la mañana a 4 de la tarde, debido a que en este espacio el astro se encuentra el periodo cúspide de radiación, por lo que se aconseja salir con una sombrilla, sombreros, gafas de sol, sin olvidar el uso de un buen bloqueador solar avalado por un dermatólogo y dejar de lado el bronceador y productos de origen vegetal.
- La prevención de enfermedades que afectan a la piel deber ser un recordatorio diario para mantener una buena salud en el cuerpo. Al no tener buenos hábitos de cuidado en las vacaciones de verano, las probabilidades de padecer cáncer de piel, deshidratación, dermatitis severa, manchas en la piel y arrugas grandes, incrementan de una manera considerable.
- Los bloqueadores y protectores solares deben aplicarse 15 minutos antes de exponerse a los ambientes soleados, esto con el fin de que la piel se encuentre lo suficientemente humectada y protegida para que no se perjudique con la exposición solar.
- Se aconseja que el protector solar debe ser resistente al agua ya que la idea de muchas personas que visitan zonas cálidas es nadar en las piscinas y el mar. Asimismo, este protector se debe volver a aplicar 40 minutos después de haberse sumergido.
- En caso de que se esté realizando un viaje largo por carretera, cada dos horas se debe aplicar el protector solar para que la piel se siga manteniendo hidratada. El uso de gafas de sol, gorras y sombrillas ayuda notablemente a la piel para que no presente quemaduras superficiales.
- El uso del bloqueador solar es importante para proteger la piel, pero no es la única medida que se debe tener en cuenta. Tomar bastante agua en las vacaciones, buscar sitios con sombra para caminar y utilizar sombrillas para caminar distancias considerables son algunas de las recomendaciones para evitar que un golpe de calor afecte no solo a la piel, sino a cualquier parte del cuerpo como la cabeza o los ojos.
Cada uno de estos consejos se realizan con la intención de cuidar la piel en medio de las vacaciones. Sin embargo, también se pueden aplicar en la vida cotidiana en lugares fríos donde no es habitual que se presenten días soleados y despejados, en donde la piel de las personas no está acostumbrada a recibir mucha radiación de este tipo.