Para hablar del jengibre, las propiedades y características de esta especia, que a su vez es una planta medicinal, procedente de Asia Central y el Sureste Asiático, hay que conocer la manera en que ayuda a mejorar ciertas funciones del cuerpo y, sobre todo, cómo es esa capacidad de aportar salud y bienestar al organismo.
En primera medida, es importante destacar que este es un producto que posee un característico aroma perfumado y refrescante con un toque de limón, que desde que se descubrieron sus capacidades y bondades en salud, se ha convertido en un medicamento eficaz a lo largo de los años.
Por su propia parte, el portal Cuerpo Mente señala que las diversas propiedades del jengibre se deben especialmente a su riqueza en aceites volátiles, pero también posee sustancias fenólicas, vitaminas (especialmente B6 y C) y minerales como calcio, magnesio, fósforo y potasio, elementos fundamentales para mejorar la salud del cerebro y facilitar sus funciones.
Además de esto, Medical News Today, en su página de internet, asevera que esta especia tiene un ácido natural llamado salicilato. Allí explican que la propia aspirina (ácido acetilsalicílico) es un derivado sintético del salicilato y por ende un potente diluyente de la sangre.
“Para obtener los efectos anticoagulantes de los salicilatos naturales, es posible que quieras usar jengibre fresco o seco regularmente para hornear, cocinar y agregarlo a tus jugos”, citan en el portal mencionado sobre la utilización de esta especia natural.
Ahora bien, el jengibre ayuda y cuida las articulaciones de las fuertes cargas a las que se le expone a diario, pues muchas veces las personas no son conscientes del cuidado de estas partes. Gracias a sus componentes bioactivos, como los gingeroles y los shogaoles, que tienen propiedades antiinflamatorias.
Estos compuestos pueden ayudar a reducir la inflamación en las articulaciones. Asimismo, esta planta tiene la capacidad de comportarse como un analgésico, con lo que puede ayudar a aliviar el dolor en las articulaciones.
Por otra parte, al ser anticoagulante y antiinflamatorio, ayuda a que no se generen enfermedades de tipo cardiovascular, con lo que con la capacidad de reducir la inflamación, el jengibre puede contribuir a la prevención de los infartos. Asimismo, ayuda a prevenir la formación de coágulos en la sangre, los cuales son causantes de infartos porque pueden obstruir las arterias coronarias.
Los que no deben consumirlo
Si bien se trata de un alimento altamente reconocido por sus beneficios para la salud, también es importante tener claro que tiene algunas contraindicaciones a las cuales se debe prestar atención y hay personas que deben evitar su ingesta.
Por ejemplo, quienes toman anticoagulantes no deben consumirlo, dado que sus compuestos activos tienen un mecanismo de acción similar a estos medicamentos, lo cual es posible que resulte inconveniente, ya que se eleva el riesgo de hematomas o hemorragias.
Tampoco debe hacer parte de la dieta de las mujeres que están en las últimas etapas del embarazo, pues es posible que genere un mayor riesgo de sangrado.
De igual forma, debe evitarse si se consumen medicamentos para la hipertensión o si la persona está en tratamiento para controlar los niveles de azúcar, debido a que sus cualidades antidiabéticas pueden conducir a un descenso considerable de los niveles de glucosa (hipoglucemia).
Cabe recordar que la información suministrada en el contenido anterior no sustituye la asesoría médica y lo mejor que puede hacer es consultar a un experto de la salud.