Hay varias razones por las cuales un gato puede irse de casa y no regresar, y estas son algunas posibles explicaciones:

  • Exploración y curiosidad: los gatos son animales curiosos por naturaleza y les gusta explorar su entorno. Si encuentran una brecha en una puerta o una ventana abierta, pueden salir a investigar y luego perderse o alejarse demasiado como para encontrar el camino de regreso.
Es importante estimular el juego en los gatos. | Foto: GettyImages
  • Cambios en el entorno: los gatos son criaturas territoriales y pueden ser sensibles a los cambios en su entorno. Si hay cambios significativos en el hogar, como una mudanza, la llegada de nuevos animales o personas, o una remodelación, el gato puede sentirse estresado y tratar de encontrar un lugar más tranquilo o familiar, alejándose de casa.
Los gatos se alejan de su casa por error o confusión. | Foto: Betsie van der Meer
  • Error o confusión: a veces, los gatos pueden simplemente perderse o confundirse. Pueden seguir a alguien que creen que es su dueño pero resulta no serlo, o pueden extraviarse en áreas desconocidas y no lograr encontrar el camino de regreso.
Los gatos tienen comportamientos diferentes. | Foto: © Sally Anscombe 2019
  • Deseo de aparearse: los gatos no esterilizados pueden escaparse en busca de compañeros para aparearse. Los instintos reproductivos pueden hacer que se aventuren más allá de su hogar en busca de gatos en celo, especialmente durante la temporada de apareamiento.
Los gatos son compañeros cariñosos y reconfortantes. | Foto: SilviaJansen

¿Cómo evitar que el gato se vaya de la casa?

1. Proporcionar un ambiente seguro en el interior: asegurarse de que el gato tenga un espacio cómodo y estimulante en el interior de la casa. Proporcionar juguetes, rascadores y áreas de descanso para mantenerlo entretenido y satisfecho. Esto ayudará a satisfacer sus necesidades naturales y reducirá su deseo de aventurarse fuera de casa.

A los gatos se les debe brindar un ambiente seguro en la casa. | Foto: 2023 Anadolu Agency

2. Mantener las ventanas y puertas cerradas: hay que asegurarse de cerrar todas las ventanas y puertas para evitar que el gato encuentre una salida. Prestar atención especial a las puertas exteriores, asegurándose de que se cierren correctamente.

Estudios han demostrado que tener un gato como mascota puede tener beneficios para la salud. | Foto: Getty Images

3. Instalar mosquiteras o rejillas en las ventanas: para mantener el aire fresco circulando sin correr el riesgo de que el gato escape, se puede considerar la posibilidad de instalar mosquiteras o rejillas en las ventanas. Esto permite que se puedan abrir las ventanas sin preocuparse de que el gato pueda salir.

4. Supervisar las salidas y entradas: si es necesario abrir una puerta o ventana, hay que asegurarse de vigilar al gato de cerca. Es importante mantenerlo alejado de la zona de entrada y salidas para evitar que escape.

Los gatos son mascotas amorosas. | Foto: Semana

5. Utilizar collares o arneses de seguridad: si lo planeado es llevar el gato al exterior, hay que asegurarse de usar un collar o arnés adecuado con una identificación clara que incluya la dirección y número de teléfono. Esto facilitará que se contacten si el gato se pierde.

6. Considerar la esterilización: los gatos no esterilizados tienen más probabilidades de intentar escapar para buscar pareja. La esterilización o castración puede ayudar a reducir este comportamiento y evitar que el gato se sienta impulsado a salir de casa.

Ahora bien, es importante señalar que cada gato es único y puede tener diferentes motivaciones para escapar.

Razas de gato recomendadas para tener en casa

  • Toyger: son inteligentes, sociables, tienen poco pelo, muy independientes y no requieren de grandes cuidados.
  • Gato himalayo: es una raza que se caracteriza por ser afectivos, obedientes y tranquilos. Sin embargo, no manejan muy bien el estrés, por lo que no son buenos con los niños u otros animales.
Los gatos himalayos son tranquilos. | Foto: 101cats/Getty Images
  • Gato balinés: esta raza es amorosa e ideal para compartir el espacio con los niños y con otros animales. No obstante, es importante saber que maullan bastante por lo que pueden resultar ruidosos.
  • Angora turco: son amistosos y enérgicos, pero suelen escoger a una persona favorita a la que demuestran más afecto que a los demás.
En general los gatos son caseros. | Foto: Getty Images / Kathrin Ziegler
  • Gato siamés: son amorosos, con mucha energía y son amigos de los niños y de los perros.
  • Gato persa: este animal está ligado a la nobleza. El cuidado de su pelo demanda tiempo y dedicación y sus ojos también requieren de cuidados importantes.
Una forma de evitar que los gatos se vayan de casa en mantener puertas y ventanas cerradas. | Foto: Anna Utekhina

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado en Semana.