La mayoría de las personas, alguna vez en la vida, se han preguntado por qué les duele la cabeza cuando comen chocolate, helado o dulce en general.

Y aunque hace unas pocas décadas no estaba muy clara la relación, actualmente se conoce que sí existe el dolor de cabeza por tener el azúcar alto o hiperglucemia. De hecho, según la situación, puede darse un ligero dolor, cefaleas o incluso migrañas, que duren horas o unos pocos días, y también puede haber mareos.

El magazín Mundo Deportivo, en su sección de salud y bienestar, señala que lo que sucede es que al comer azúcar, sube el nivel de glucosa en la sangre, pero si el organismo no puede realizar bien los procesos necesarios para usar esta glucosa, se queda en exceso en la sangre produciendo una hiperglucemia o nivel de glucosa alto en sangre y diversos problemas derivados, entre ellos mareos y el dolores de cabeza.

Pero no solo eso, también origina cambios en hormonas (epinefrina y norepinefrina) que afectan a los vasos sanguíneos del cerebro, lo que puede desencadenar cefalea, según el portal Saber Vivir.

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La comida azucarada hace que el azúcar en la sangre aumente y disminuya rápidamente, explica Medhat Mikhael, doctor y director médico del programa no operativo del Centro de Salud de la Columna vertebral en el MemorialCare Orange Coast Medical Center.

“Esto podría provocar una hipoglucemia reactiva o un nivel bajo de azúcar en la sangre después de las comidas, que puede dejarte mareado y aturdido. Lo que es peor, también podría dejarte débil, sudoroso o incluso un poco tembloroso”, según el National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases y la Clínica Mayo.

En concreto, el dolor de cabeza se produce porque el exceso de glucosa en sangre hace que los eritrocitos o glóbulos rojos liberen parte del agua que contienen para compensar la situación y diluir el plasma hipertónico, es decir cargado de glucosa, y ayudar a volver al estado normal.

Esto produce una deshidratación de las células, mala circulación y falta de oxígeno en las células. Se nota especialmente en la cabeza porque las arterias craneales son especialmente sensibles a la saturación de la sangre.

Causas

Este problema tiene diversas causas de base, por lo que puede darse en personas que tengan:

  • Una alimentación habitual con pocos azúcares.
  • Alguien que coma gran cantidad de azúcares una sola vez, sin necesidad de tener alguna de las anteriores situaciones.
  • Resistencia a la insulina.
  • Con otros problemas en el páncreas y el hígado.

Otros alimentos

Los quesos añejos, el vino tinto y la charcutería de lujo, además de ser las estrellas del tapeo, también contienen tiramina, un aminoácido conocido por desencadenar migrañas en personas propensas a ellas, señala la National Headache Foundation.

Los alimentos que contienen conservantes químicos como nitratos, sulfitos o glutamato monosódico también pueden provocar migrañas al aumentar el flujo de sangre al cerebro.

Estos aditivos se encuentran a menudo en carnes procesadas (como los perritos calientes y los embutidos), alcohol, salsa de soja y sopa de lata, según fuentes de la National Headache Foundation.

Si los alimentos crujientes tienden a afectar la cabeza es posible que sea un trastorno de dolor miofascial o dolor en los músculos que mueven la mandíbula. “Al igual que puedes tener un dolor muscular después de un entrenamiento intenso, el mismo tipo de dolor puede ocurrir si haces que los músculos de tu mandíbula se agoten al esforzarte y apretar con fuerza”, explica Daria Hamrah, doctora del Centro Nova Surgicare para el rejuvenecimiento oral y facial.

Recomendación: acudir con el médico lo antes posible si el dolor de cabeza se da inmediatamente la persona consume dulce. Además, se sugiere cuidar la dieta, reducir el consumo de azúcar y llevar un estilo de vida saludable.