La forma de vida que actualmente llevan miles de personas alrededor del mundo ha hecho que la actividad física haya pasado a un segundo plano, lo cual ha comenzado a arrojar datos alarmantes entre las entidades encargadas de velar por la salud mundial.
Y es que más allá de la falta de movimiento físico y de las consecuencias que esto puede acarrear a la salud de las personas, un aspecto que ha comenzado a preocupar a los especialistas es el hecho de que esta inactividad está afectando en gran medida la salud mental de muchos.
Inactividad física y problemas mentales
Entre menos movimiento se presenta en la vida de las personas, es más probable que comiencen a aparecer efectos negativos en su salud mental.
De acuerdo con Laura Marcela Ayala Tello, subdirectora Nacional Campo de Psicología del Deporte y el Ejercicio del Colegio Colombiano de Psicólogos, Colpsic, las afecciones pueden ser pérdida del sentido de vida, aumento del cansancio o agotamiento, problemas para dormir, estrés crónico, entre otros.
Es por eso que la actividad física se ubica como una necesidad imperante para tener una mejor calidad de vida y prevenir posibles enfermedades. Sin embargo, de acuerdo con las cifras de la OMS, uno de cada cuatro adultos no cumple con los niveles recomendados de actividad física, lo que ha encendido las alarmas a nivel mundial.
Expertos como la doctora Ayala evidencian las ventajas que puede ofrecer la práctica de alguna actividad física constante, como es el buen manejo de las emociones y el poder descargar las tensiones que trae el día a día, sobre todo para las personas que sufren de estrés, entre otros.
Y continúa afirmando lo siguiente: “Previene enfermedades, nos da claridad ante las preocupaciones que nos puedan estar afectando, reduce síntomas psicológicos que puedan estar deteriorando nuestra salud mental y promueve estrategias de afrontamiento adecuadas para los retos que se nos puedan presentar”.
Recomendaciones para mantenerse activo
La doctora Ayala recomienda tener siempre un tiempo diario reservado exclusivamente para la realización de actividad física. Además, es bueno realizar varios tipos de ejercicios para que no se vuelva una práctica rutinaria y aburrida que haga que las personas desistan en poco tiempo.
La OMS recomienda un mínimo de 15 minutos al día destinados a ello, ya sea para realizar el ejercicio al aire libre o en espacios cerrados.
Pero no solo se puede mantener el cuerpo activo realizando actividades por fuera de la casa. Si usted es de esas personas que prefiere hacer rutinas en casa, puede comenzar por practicar yoga, pilates o bailes. y rutinas de poco impacto.
Ahora, si usted prefiere cambiar de ambiente y darse una pequeña escapada, no hay problema, pues puede dar pequeños paseos por sitios cercanos o dedicar un tiempo al baile, la gimnasia aeróbica, el running, el spinning o la natación.
Finalmente, para los que están mucho tiempo frente a las pantallas, los especialistas recomiendan hacer caminatas hasta el lugar de trabajo o llegar en bicicleta. Otra opción es evitar el uso de ascensores y hacer pausas activas que incluyan estiramientos y ejercicios para distensionar los músculos.
Con estas fáciles recomendaciones, su vida podrá dar un giro de 360 grados, gozando de los beneficios de llevar una vida con tranquilidad física y mental.