El estrés, el trabajo y las ocupaciones han hecho que las personas en la actualidad padezcan de diversas patologías que afectan de manera directa su salud mental. Las enfermedades más diagnósticas son la depresión y la ansiedad.

En algunas ocasiones para darle manejo es importante contar con la ayuda de un profesional como el psicólogo o el psiquiatra, e incluso debido a la intensidad de los síntomas, algunos pacientes requieren de medicación para luchar contra dichos padecimientos.

Para contrarrestar estos síntomas es crucial sacarse de la cabeza ciertos estereotipos, entre los que se encuentran mitos como que ir a un psicólogo o psiquiatra es sinónimo de estar loco; varias de estas patologías se desencadenan debido a que hay alteraciones en el cerebro que hacen que determinadas hormonas, como por ejemplo, la de la felicidad (serotonina) no se estén produciendo con la misma intensidad.

Estos padecimientos también se pueden presentar en personas que han estado en contacto con situaciones traumáticas o incluso se puede desencadenar, luego de la pérdida de un familiar o una persona cercana al núcleo social. Lo relevante es, siempre, consultar, para recibir un diagnóstico acertado y, de la mano del profesional, encontrar las estrategias que lleven al paciente a tener una mejor calidad de vida.

Beneficios de cuidar de la salud mental

El portal de salud, belleza y cuidado personal Mejor con Salud brinda algunos beneficios que revelan la importancia de cuidar la salud mental.

  • Favorece el equilibrio psicológico y social: Cuando una persona tiene una buena salud, tiene relaciones sanas con sus pares e incluso maneja una relación saludable consigo mismo. Cuando un paciente se siente a gusto consigo mismo, gestiona mejor las preocupaciones, los retos y los inconvenientes que pueden surgir en el día a día. Cuando una persona está cargada, estresada o agobiada, explotará y solucionará de manera incorrecta situaciones a las que se les podría haber dado un mejor manejo.
  • Crea relaciones saludables y enriquecedoras: Una salud mental sana garantizará una buena escogencia de las personas para establecer relaciones, entre estas las sentimentales. El paciente que no está bien a nivel emocional, puede verse afectado a la hora de integrarse o involucrarse con sus pares y esto puede llevarlo a distanciarse y a tener una sensación de soledad.
Según Ceinfes, el 50 por ciento de los jóvenes piensa que es una persona que no vale para nada, uno de los indicadores más preocupantes de su más reciente estudio. | Foto: iStock
  • Mantiene la ansiedad a raya: Cuando el estrés se vuelve crónico, constante y es mal gestionado, se puede transformar en ansiedad. Una vez esto sucede, es importante no hacer caso omiso a la alerta que indica que algo está afectando a la persona de manera constante y que se está ignorando de manera recurrente.
  • Omite y deja atrás el pasado: “Tener una buena salud mental ayuda a tomar perspectiva. Evitando que ciertas situaciones o circunstancias pasadas sigan torturando o atormentando, en el presente, a las personas”.
  • Ayuda a afrontar las presiones: cuando una persona goza de una buena salud mental, también cuenta con una buena autoestima, por ende no se deja abrumar o no se decae tan fácil ante comentarios ajenos y negativos recibidos por otras personas.