Los gatos se lamen entre ellos como una forma de comportamiento social y de cuidado mutuo. A este comportamiento se le conoce como acicalamiento social o allogrooming.

Además, hay varias razones por las que los gatos se lamen entre sí:

1. Limpieza: los gatos son animales muy limpios y se dedican mucho tiempo a acicalarse a sí mismos. Al lamerse entre ellos, también ayudan a mantenerse limpios, especialmente en áreas difíciles de alcanzar, como la cabeza y el cuello.

2. Vínculo social: el acicalamiento mutuo ayuda a fortalecer los lazos entre los gatos. Es una forma de interacción social y puede promover un sentido de comunidad y bienestar en un grupo de gatos que conviven juntos.

3. Jerarquía y sumisión: en los grupos de gatos, el acicalamiento también puede estar relacionado con la jerarquía social. Los gatos dominantes a menudo acicalarán a los gatos subordinados como una muestra de su estatus superior. A su vez, los gatos subordinados pueden lamer a los gatos dominantes como una señal de sumisión y respeto.

4. Reducción del estrés: el acicalamiento mutuo puede tener un efecto calmante en los gatos y ayudar a reducir el estrés. Al lamerse entre sí, liberan endorfinas, lo que puede generar una sensación de relajación y bienestar.

Los gatos tienen una lengua áspera que está diseñada para limpiar y acicalar su pelaje. | Foto: Getty Images

En general, el comportamiento de lamer el pelaje es instintivo en los gatos y cumple varias funciones importantes para su bienestar físico y emocional. Sin embargo, si se nota que el gato lame su pelaje de manera excesiva o compulsiva, podría ser indicativo de un problema de salud o estrés, y en ese caso, es recomendable consultar a un veterinario para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados.

¿Cada cuanto se lame el pelaje el gato?

Los gatos son conocidos por ser animales muy limpios y se dedican mucho tiempo al aseo personal. En promedio, un gato puede pasar entre el 30 % y el 50 % de su tiempo despierto acicalándose. Esto implica lamer su pelaje para mantenerlo limpio y sin enredos.

De hecho, el comportamiento de lamer el pelaje es instintivo en los gatos y cumple varias funciones importantes para su bienestar físico y emocional.

En promedio, un gato puede pasar entre el 30 % y el 50 % de su tiempo despierto acicalándose. | Foto: Anna Utekhina

En cuanto a la frecuencia con la que se lamen el pelaje, puede variar según el gato y sus circunstancias individuales. Los gatos de pelo corto suelen requerir menos cuidado en comparación con los de pelo largo. Un gato de pelo corto puede lamerse el pelaje varias veces al día, mientras que los gatos de pelo largo pueden necesitar más tiempo y esfuerzo para mantener su pelaje en buenas condiciones y podrían lamerse con mayor frecuencia.

Además, hay que señalar que los gatos se lamen para regular su temperatura corporal, estimular la circulación sanguínea y relajarse. También se lamen para mantenerse limpios después de comer, eliminar olores extraños o sustancias en su pelaje, y acicalarse mutuamente en el caso de gatos que conviven en un mismo entorno.

Los gatos se lamen entre ellos como una forma de comportamiento social y de cuidado mutuo. | Foto: Jan Håkan Dahlström

De igual forma, los gatos cuando lamen su pelaje distribuyen los aceites naturales producidos por su piel a lo largo de su pelaje. Esto ayuda a mantenerlo suave, brillante y en buen estado.

Asimismo, el acto de lamer el pelaje puede tener un efecto calmante en los gatos, ya que les brinda una sensación de bienestar y puede ayudar a aliviar el estrés o la ansiedad.

En resumen, es completamente normal y saludable que los gatos se laman el pelaje.

No obstante, si un gato no lame su pelaje puede presentar:

1. Pelaje sucio y enredado.

2. Problemas de piel.

3. Acumulación de pelo muerto.

4. Infecciones y parásitos.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado en Semana