La avena se ha convertido en uno de los alimentos más preciados de la alimentación saludable. Gracias a su composición nutricional junto a los carbohidratos y la fibra, se halla más proteína, grasa y minerales en la avena que en otros cereales. La avena aporta grandes cantidades de magnesio, cobre, hierro, zinc y vitamina B1, así como pequeñas dosis de calcio, ácido fólico y otras vitaminas del grupo B. Además, es rica en manganeso.

Tiene sustancias que la hacen única, como los betaglucanos y unos antioxidantes llamados avenantramidas, que le otorgan grandes beneficios para la salud del cuerpo en general, según explica el portal de salud, medicina y cuidado personal Cuerpo y Mente.

Beneficios de consumir avena

  • Alimenta las bacterias buenas del intestino: este cereal es rico en una fibra soluble llamada betaglucano, que es fermentable. Este componente hace que la avena tenga un efecto prebiótico en el intestino; es decir, alimenta y favorece el resurgimiento de las bacterias buenas en este órgano.
Expertos afirman que comer avena en las noches ayuda a relajar los músculos y disminuye la presión arterial. | Foto: Gettyimages
  • Reduce los niveles de colesterol: los betaglucanos que contienen este cereal ayudan a reducir el colesterol malo (LDL) de la sangre.

¿Por qué es importante remojar la avena antes de consumirla?

El portal Cocina Fácil menciona que cuando este cereal se remoja se pueden aprovechar más sus beneficios. Al dejarse en agua la avena se hace mas digerible; por ende se pueden absorber mejor sus propiedades y nutrientes ayudando también a procesar de mejor forma las vitaminas y minerales de otros alimentos.

La avena está compuesta en un 50 % de almidón, por lo que el remojarla ayudará a determinadas personas a asimilar y procesarla mejor. El medio menciona cuales es la forma correcta de remojar la avena para adquirir sus beneficios en su totalidad.

  • En primer lugar, se debe colocar en un recipiente la cantidad de avena que se va a usar para la preparación.
  • Luego, se debe llenar con agua hasta que sobrepase la avena.
  • Añadir un medio ácido (puede ser una cucharadita de vinagre de manzana o el jugo de medio limón).
  • No mezclar, dejar reposar y conservar en un lugar fresco, pero no en el refrigerador.
  • Dejar reposar mínimo 10 horas (el medio recomienda que se durante toda la noche).
  • Finalmente, enjuagar, colar y usar la avena para la preparación que se desee.

¿Cómo preparar una torta de avena?

Ingredientes:

  • 50 gramos de harina de avena.
  • 10 gramos de copos de avena.
  • 60 gramos de harina integral.
  • 30 gramos de harina de trigo.
  • 8 gramos de polvo para hornear.
  • Una pizca de sal.
  • Una cucharadita de orégano.
  • Una cucharadita sopera de queso rallado.
  • Media cucharadita de cúrcuma.
  • Una pizca de pimienta negra.
  • 75 centímetros cúbicos de agua.
  • Una cucharada sopera de aceite y una cucharada sopera de queso crema.
Con la avena se pueden hacer varias y sencillas preparaciones como una torta. | Foto: Getty Images

Preparación:

  • Mezclar los ingredientes secos en un mismo recipiente (tamizar o colar cada una de las harinas).
  • Una vez mezclados, realizar una pequeño orificio en el centro.
  • Agregar, en el centro, los ingredientes líquidos —queso crema, aceite y agua— y trabajar con las manos hasta que la mezcla adquiera una consistencia homogénea, sin grumos o aspecto pegajoso.
  • Estirar la masa sobre una superficie y alargarla con la ayuda de un rodillo hasta conseguir un grosor de un centímetro de alto.
  • Luego, doblar la masa y volver a estirar sucesivamente, poco a poco, hasta conseguir un grosor que no sobrepase los dos centímetros.
  • Una vez que está lista, cortar varios trozos para formar bizcochos más pequeños. Se pueden dejar en forma de cuadrados.
  • Colocar cada bizcocho en una fuente para horno previamente engrasada y cocinarlos durante 15 minutos a 200 grados centígrados con calor por ambas caras.
  • Se pueden unir y crear una torta completa, agregar miel orgánica o acompañarlos con una infusión natural.