Los dientes son una parte muy importante de la boca, ya que son piezas relevantes y esenciales para ingerir los alimentos que se consumen a diario, pues tienen como función principal triturar y masticar para que sean fáciles de digerir.
De igual manera, entre las piezas dentales que más sufren dolencias están las muelas, las cuales pueden tener daños por las caries dentales, las infecciones o irritaciones en las encías. Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, apunta que las caries son causadas por una mala higiene, pero también puede ser un problema hereditario, por lo que hay que lidiar con ellas para que no hagan destrozos en la dentadura.
Entre las razones que pueden generar un dolor de muela se ubica: caries dental, trauma al diente (como desgaste, lesión o fractura), dolor de oído, lesión en la mandíbula o la boca o sinusitis. En cada caso es mejor tomar precauciones y saber qué camino tomar para eliminar el malestar.
Ante esta situación, es importante prestar atención y recurrir a alternativas que puedan aliviar el dolor. Se puede hacer a través de medicamentos, atenciones médicas o remedios caseros.
De hecho, el portal Healthline compartió una lista de remedios que se pueden usar para mejorar estos malestares y así reducir la incomodidad que generan estos síntomas. Las preparaciones o productos son naturales y sencillos de conseguir, evitando que la afección se extienda o prolongue por mucho tiempo.
Remedio de agua con sal
De acuerdo con el portal, uno de los remedios más conocidos y efectivos entre las personas es el enjuague de agua con sal, ya que es efectivo y brinda beneficios en la boca. Según lo mencionado, esta combinación hace el papel de desinfectante natural y puede ayudar a aflojar los desechos y las partículas de comida que quedan atrapados entre los dientes.
Al hacer enjuagues con esta preparación se puede lidiar con la inflamación y se curan las heridas bucales que se forman.
Preparación:
Mezclar 1/2 cucharada de sal en un vaso de agua tibia, revolverlo y hacer buches como si fuera un enjuague bucal, logrando que llegue el líquido a la zona de la molestia.
Es importante tener en cuenta que si el dolor se vuelve más constante y fuerte, lo mejor es recurrir a su dentista para que se haga la respectiva revisión y así se solucione el tema con la muela, antes de que sea un poco más delicado.