Una de las patologías más comunes a nivel mundial es la fiebre. Ante la presencia de alguna infección o enfermedad, esta es una de las formas más comunes en que el sistema inmunitario reacciona para combatirla. De acuerdo con Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, las infecciones son las que causan la mayoría de las fiebres, pues el cuerpo está tratando de matar el virus o las bacterias que causaron la infección.

De hecho, la fiebre normalmente desaparece al cabo de algunos días, disminuyendo los niveles elevados en la temperatura corporal, aunque esta varía levemente según la persona y el momento del día. La temperatura promedio se ha establecido tradicionalmente en los 98,6 grados Fahrenheit (37 grados Celsius) y se entiende que una persona tiene fiebre si, al tomarle la temperatura con un termómetro oral, la temperatura en la boca es de 100 grados Fahrenheit (37,8 grados Celsius) o más.

¿Cómo reducir la fiebre de forma casera? | Foto: Semana

En la gran mayoría de los casos, no es un motivo de preocupación, pero sí suele causar mucho malestar. En los bebés y adultos mayores puede llegar a complicarse, provocando sudoración, escalofríos y temblores; dolores musculares, dolor de cabeza, pérdida de petito, deshidratación, debilidad en general, irritabilidad y deshidratación.

Sin embargo, el mejor momento para bajar este síntoma es cuando el cuerpo no es capaz de tolerarla, en una temperatura que oscila entre 38 y 39 ºC. Aunque en muchos casos, suelen mejorar estos niveles sin la necesidad de la ingesta de medicamentos, en otros podría ser conveniente no bajarla, pero depende mucho del malestar de cada persona.

La fiebre o escalofríos puede ser un síntoma de leucemia. Foto: Getty Images. | Foto: Foto: Getty Images.

Precisamente, el portal especializado Mejor con Salud recomendó algunos remedios naturales, caseros y fáciles de realizar con el fin de combatir la fiebre y mitigar los niveles de temperatura.

1. Compresas húmedas

Una de las estrategias más populares es la aplicación de compresas húmedas. Sin embargo, un artículo divulgado en National Center for Biotechnology Information y citado por el portal, precisó que aunque esto no baja la fiebre, sí ayuda a refrescar el cuerpo.

Las compresas no deben ser heladas dado que pueden empeorar el escalofrío. Lo ideal es que estén a temperatura ambiente. Incluso, si ya hay escalofríos, funcionan las compresas tibias. Para colocarlas, bastará con ubicarlas en la cabeza, axilas, ingle y pies. Solo deben estar mojadas por agua; ninguna otra sustancia debe entrar en contacto, porque puede ocasionar un efecto contraproducente.

2. Ducha tibia y desabrigarse

Las duchas tibias, junto con estar desabrigado, es similar a la de las compresas. En algunas personas es útil para reducir el malestar y disminuir la temperatura corporal. Por lo general, es una medida implementada en casos de fiebre alta mientras se acude al médico.

El baño con agua tibia es recomendable. | Foto: Getty Images

Es fundamental que el agua este tibia, dado que la fría puede derivar un shock térmico. Entre tanto, la caliente resulta sofocante y contraproducente. El baño puede extenderse entre 20 y 30 minutos. No obstante, si deriva más escalofríos, debe suspenderse.

También es importante no arroparse demasiado a pesar de que pueda sentirse frío. Esto solo empeorará la elevación de la temperatura y, al cabo de algunas horas, agravará el malestar. Por lo general, llevar ropa ligera y cubrirse con una manta suele ser suficiente.

3. Guardar reposo

Otra alternativa para disminuir la fiebre es guardar reposo. Pese a ser un síntoma alarmante, la fiebre tiende a desaparecer por sí sola sin medicamentos o tratamientos específicos. De hecho, un estado de quietud es la mejor opción para obtener alivio, pues permite que la fiebre cumpla su papel defensivo sin hacer el mayor esfuerzo.

En el caso de los niños, estos deben suspender actividades escolares y recreativas, según Mejor con Salud.