Es muy normal que en diferentes alimentos o productos se encuentre, como compuesto, una sustancia tan común a nivel mundial como el azúcar. Esta también se consigue en su propio estado. Tiene un color blanco muy marcado y se obtiene a través de la caña. Al ingresar al organismo se convierte en glucosa.
La glucosa es la principal fuente de energía del organismo. Por lo tanto, es muy importante para un órgano como el cerebro. Pero cuando sus niveles se elevan sin control en la sangre, resultado del abuso del consumo de alimentos ricos en azúcar, le puede provocar al cuerpo graves problemas.
Uno de los problemas más usuales es el surgimiento de la diabetes, la cual es una enfermedad crónica y metabólica. Al ser crónica, no tiene cura. Afecta a miles de personas en Colombia y en diferentes partes del mundo. Está relacionada con la forma en la que el cuerpo convierte los alimentos en energía.
“La diabetes es una enfermedad en la que los niveles de glucosa (azúcar) de la sangre están muy altos. La glucosa proviene de los alimentos que consume. La insulina es una hormona que ayuda a que la glucosa entre a las células para suministrarles energía. En la diabetes tipo 1, el cuerpo no produce insulina. En la diabetes tipo 2, la más común, el cuerpo no produce o no usa la insulina de manera adecuada. Sin suficiente insulina, la glucosa permanece en la sangre”, explica Medline Plus, Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
Y agrega que “con el tiempo, el exceso de glucosa en la sangre puede causar problemas serios. Puede dañar los ojos, los riñones y los nervios. La diabetes también puede causar enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y la necesidad de amputar un miembro. Las mujeres embarazadas también pueden desarrollar diabetes, llamada diabetes gestacional”.
Los principales síntomas de la diabetes son los problemas de visión, la debilidad o fatiga, la pérdida de peso sin razón alguna, el aumento de la sed, la micción frecuente, las heridas que tardan en sanar, el hormigueo en las manos y en los pies, entre otras cosas más.
Así como muchas enfermedades, por fortuna, la diabetes se puede prevenir. ¿Cómo se logra eso? Realmente es muy sencillo, lo único necesario es limitar o restringir el consumo de una sustancia como el azúcar.
Asimismo, es oportuno hacer hincapié que, para evitar la diabetes, existe un alimento de origen vegetal que tiene la capacidad de regular los niveles del azúcar o glucosa en la sangre. Se trata de las semillas de zapallo, las cuales son muy poco consumidas.
Semillas que bajan el azúcar
“Las semillas de zapallo son una fuente excelente de magnesio. Este mineral desempeña un papel fundamental en la regulación de la glucosa en sangre, ya que ayuda a las células a responder adecuadamente a la insulina. El consumo regular de magnesio puede mejorar la sensibilidad a la insulina y ayudar a mantener niveles de azúcar en sangre estables”, afirma la plataforma digital La Vida Lúcida.
De todas maneras, es válido mencionar que el consumo de las semillas de zapallo debe ser moderado, sin llegar a un exceso, esto para que sus efectos de regular la glucosa en la sangre se logre cumplir de la mejor manera posible.
“Estas pequeñas semillas también son una fuente significativa de fibra dietética, incluyendo tanto fibra soluble como insoluble. La fibra es esencial para ralentizar la absorción de azúcar en sangre, lo que evita picos y caídas bruscas en los niveles de glucosa. Esto es particularmente beneficioso para las personas con diabetes, ya que contribuye al control de los niveles de azúcar en sangre”, concluye.