La presión arterial está relacionada con la fuerza que realiza el corazón para bombear sangre por todo el cuerpo, la tensión alta puede generar inconvenientes en el sistema cardiovascular que pueden generar la muerte. Por esa razón es importante controlar la presión.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) explica que en la tensión arterial se dan dos valores: el primero es la presión sistólica, la cual corresponde al momento en que el corazón se contrae o late; el segundo es la tensión diastólica, que representa la presión ejercida sobre los vasos cuando el corazón se relaja entre un latido y otro.
Así se puede regular la presión arterial
- Bajar de peso: este es uno de los cambios en el estilo de vida más eficaces para controlar la presión arterial. Si la persona tiene sobrepeso u obesidad, bajar incluso una pequeña cantidad puede ser de gran utilidad.
- Actividad física regular: La recomendación de los especialistas es realizar ejercicio moderado al menos 30 minutos cada día, cinco días a la semana. Si la presión arterial es alta, el ejercicio previene que se transforme en hipertensión. Si ya se es hipertenso, la actividad física regular reduce la presión arterial a niveles más seguros.
- Dieta saludable: llevar una alimentación que contenga gran cantidad de cereales integrales, frutas, verduras y productos lácteos con bajo contenido de grasa y que reduzca las grasas saturadas y el colesterol puede disminuir la presión arterial.
- Menos sodio: La reducción de sodio en la alimentación puede mejorar la salud cardíaca y reducir la presión arterial.
- Limitar el alcohol: si se bebe alcohol con moderación, una bebida por día para las mujeres o dos para los hombres, la presión arterial puede reducirse potencialmente.
- Bajar el estrés: el estrés crónico puede contribuir a una presión arterial alta, mientras que el ocasional también puede incrementarla si la reacción al estrés es consumir alimentos poco saludables, beber alcohol o fumar.
Infusión de orégano
Además de su uso en la cocina, el orégano ha sido aprovechado por la medicina natural en múltiples remedios caseros, enfocados en controlar el síndrome metabólico, la obesidad, la diabetes y la hipertensión arterial.
Un valor agregado al orégano es que, al ser un condimento popular, puede ser utilizado en la cocina para reducir la ingesta de sal. Adicionalmente, hay estudios que han encontrado una relación entre esta planta y el aumento del colesterol bueno/reducción del colesterol malo, lo que beneficia la salud cardiovascular.
Además, hay estudios que han encontrado una relación entre esta planta y el aumento del colesterol bueno/reducción del colesterol malo, lo que beneficia la salud cardiovascular. Puede ser usado en la cocina para reducir la ingesta de sal.
Manzana
Las frutas son tan importantes que, por ejemplo, una de ellas en especial resalta entre las demás porque ayuda a disminuir de forma considerable los triglicéridos en la sangre y controlar la presión arterial, indicadores que pueden causar un ataque al corazón. Se trata de la muy conocida y deliciosa manzana.
De todos modos, antes de consumir algún alimento lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.
Las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas y la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
“Según los estudios de expertos en salud, la manzana ayuda al proceso digestivo, además previene enfermedades crónicas degenerativas como la diabetes y la hipertensión. La manzana es una fruta conocida por su sabor simple, pero es una de las más ricas en fibra y que además puede bajar el exceso de lípidos en la sangre”, reseña la plataforma digital Terra.