La presión arterial alta (hipertensión) es una afección frecuente en la que la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias con el transcurso del tiempo es lo suficientemente alta como para poder causarte problemas de salud, como una enfermedad cardíaca, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Asimismo, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explicó que los niveles son:
- Una presión arterial normal es menor a 120/80 mm Hg la mayoría de las veces.
- Una presión arterial alta (hipertensión) es mayor a 130/80 mm Hg la mayoría de las veces.
- Si el número superior de la presión arterial está entre 120 y 130 mm Hg y el número inferior es menor a 80 mm Hg, se denomina presión arterial elevada.
Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reveló que, según los cálculos, el 46 % de los adultos hipertensos desconocen que padecen esta afección y entre los factores de riesgo modificables figuran las dietas malsanas (consumo excesivo de sal, dietas ricas en grasas saturadas y grasas trans e ingesta insuficiente de frutas y verduras), la inactividad física, el consumo de tabaco y alcohol y el sobrepeso o la obesidad.
Sin embargo, existen factores de riesgo no modificables, como los antecedentes familiares de hipertensión, la edad superior a los 65 años y la concurrencia de otras enfermedades, como diabetes o nefropatías.
Entre tanto, según la entidad sin ánimo de lucro, la mayoría de las personas con presión arterial alta no tienen signos ni síntomas, incluso si las lecturas de presión arterial alcanzan niveles peligrosamente elevados.
Sin embargo, algunas personas con presión arterial alta pueden tener dolor de cabeza, dificultad para respirar o sangrado nasal, pero estos signos y síntomas no son específicos y, por lo general, no se presentan hasta que dicho trastorno alcanza una etapa grave o potencialmente fatal.
Sobre la misma línea, la biblioteca señaló que la presión arterial alta puede provocar daños en los vasos sanguíneos en la retina y los síntomas pueden incluir visión doble, visión débil o pérdida de la visión.
Dicho lo anterior, la entidad sin ánimo de lucro señaló que cambiar el estilo de vida puede ayudar a controlar la presión arterial alta y unas recomendaciones son:
- Seguir una dieta saludable para el corazón con menos sal (a menos de 5 g diarios) y la sal debería ser yodada.
- Consumir más frutas y verduras: estas aportan vitaminas y minerales y la Organización Mundial de la Salud recomienda consumir por lo menos 400 g. diarios para obtener sus beneficios para la salud y nutricionales.
- Hacer actividad física con regularidad: las nuevas directrices de la OMS recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, y un promedio de 60 minutos al día para los niños y adolescentes.
- Mantener un peso saludable o bajar de peso, si se tiene sobrepeso u obesidad.
- Limitar la cantidad de alcohol que se bebe: para los adultos sanos, beber alcohol con moderación significa hasta una copa por día. Para las mujeres de todas las edades y para los hombres mayores de 65 años, hasta dos diarias.
De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.
Presión arterial: ¿cómo bajarla saludablemente?
Para las personas que no lo saben, el corazón late cerca de 200.000 veces al día. Una acción de la que muchos no son conscientes, pero sin la cual no podrían vivir. Cada latido impulsa la sangre por las venas y hace que llegue a todo el cuerpo.
“La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias al ser bombeada por el corazón. La presión arterial es más alta cuando el corazón se contrae, bombeando la sangre, y se denomina presión sistólica. Cuando el corazón está en reposo, entre latidos, la presión arterial baja y es llamada presión diastólica”, explican desde la Fundación Española del Corazón.
Cabe resaltar que la hipertensión arterial causa más muertes en el mundo que el tabaquismo. Sin embargo, aproximadamente la mitad de la población mundial hipertensa no está controlada en forma adecuada, aún cuando se sabe que el control de la presión arterial reduce un 40 % la incidencia de accidente cerebrovascular y un 25 % el infarto de miocardio, según el Consejo de Hipertensión de la SAC (Sociedad Argentina de Cardiología).
Según explican los especialistas, la presión arterial normal está por debajo de 120/80 milímetros de mercurio (mm Hg). Mientras que se considera alta si está entre 120-139/80-89 mm Hg. Por último, una persona hipertensa tiene unos valores por encima de 140-90 mm Hg.
Por otro lado, la Universidad de Harvard destaca que la presión normal es inferior a 120/80. Sin embargo, previamente, el American College of Cardiology y la American Heart Association señalaban que las pautas de normalidad eran de 140/90.
¿Cómo medirla?
- Según Harvard, la presión comienza a catalogarse como elevada cuando los números oscilan entre 120-129 mm Hg sistólica y menos de 80 mm Hg diastólica.
- Las pautas de presión arterial alta en etapa 1 son de 130 y 139 sistólica o entre 80 y 90 diastólica. La presión arterial de etapa 2 está por encima de 140 sistólica o 90 diastólica.
- Las pautas de las crisis de hipertensión son superiores a 180 mm Hg sistólica y más de 120 mm Hg diastólica.
Remedios para bajar la tensión
Desde la Fundación Española del Corazón indican estos remedios para bajar la tensión y mantener una buena salud:
- Limitar la cantidad de alcohol.
- Llevar una dieta saludable.
- Dejar de fumar.
- Reducir el estrés.
- Tomar la medicación acordada por tu médico para la hipertensión.
- Realizar mediciones periódicas.
- Perder peso.
- Incrementar la actividad física.
- Restringir la ingesta de sal.
Jugo de remolacha para bajar la presión arterial
Los científicos han comprobado que el nitrato contenido en el jugo de esta hortaliza es el que ayuda a problemas de la salud como bajar la presión sanguínea.
Un estudio publicado en la revista médica estadounidense Hypertension mostró que la tensión arterial se reducía en un período de 24 horas tanto en pacientes que habían tomado pastillas de nitrato como en aquellos que bebían jugo de remolacha.
Por otra parte, un estudio previo realizado en Reino Unido había llegado a la conclusión de que consumir diariamente medio litro de jugo de remolacha ayuda a disminuir significativamente la presión arterial en personas con valores normales.
“Demostramos que la remolacha y las cápsulas de nitrato son igualmente eficaces para reducir la tensión arterial, lo que indica que existe un contenido de nitrato en el jugo de remolacha en el que subyace su potencial reductor de las presión”, afirmó la doctora Amrita Ahluwalia, autora del estudio y profesora de farmacología vascular del Hospital Barts y de la Escuela de Medicina de Londres.