La presión arterial es una medición de la fuerza ejercida contra las paredes de las arterias a medida que el corazón bombea sangre al cuerpo. Para identificar si se posee esta en sus niveles altos es necesaria la ayuda de un brazalete inflable alrededor del brazo, el cual, mide la presión arterial con un tensiómetro.
Se dice que la presión arterial alta, también llamada hipertensión, es una enfermedad silenciosa. Se trata de una afirmación que surge debido a que puede ir dañando el organismo durante varios años antes de que la sintomatología comience a aparecer.
Una presión arterial normal es cuando la presión arterial es menor a 120/80 mm Hg la mayoría de las veces en que es tomada. Una presión arterial alta es cuando uno o ambos números de la presión arterial son mayores de 130/80 mm Hg la mayoría de las veces.
Si no se controla la hipertensión puede causar desde discapacidad, pasando por afectaciones en la calidad de vida e incluso puede llegar a poner en riesgo a las personas, llevándolas a sufrir hasta un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular fatal, explica Mayo Clinic.
Para controlar la presión arterial es indispensable mantener hábitos saludables que ayudarán a evitar la hipertensión o en caso de que se padezca, ayudar a reducirla. Un médico es la persona indicada para recetar el tratamiento necesario dependiendo cada individuo.
Así mismo, es importante conocer que algunas vitaminas pueden ayudar a cumplir este objetivo. Algunas de las pueden regular la presión arterial alta, son:
Vitamina D
La vitamina D se popularizó durante los últimos años, aunque sus funciones están asociadas a factores hormonales. La deficiencia de vitamina D se asocia con enfermedades óseas, diabetes, depresión, esclerosis múltiple y/o problemas cardiovasculares.
Un trabajo presentado durante la reunión de la Sociedad Europea de Hipertensión, que se celebra en Londres, aseguró que los suplementos de esta vitamina podrían ayudar a controlar la presión arterial en personas hipertensas.
Aunque la vitamina D está presente en algunos alimentos, la mayor parte se sintetiza a través de la piel en reacción a la luz solar.
Vitamina B
Las vitaminas del grupo B (B1, B2, B3, B5, B6, B7, B12) contribuyen a mantener las neuronas sanas y los glóbulos sanguíneos en niveles óptimos.
Además, este complejo de vitaminas contribuye a la elaboración de cadenas de ADN y juegan un rol importante en el mantenimiento de los niveles de homocisteína, sustancia importante en la prevención de enfermedades cardiovasculares.
Carnes animales como el pescado, el pollo, la carne de res, así como los lácteos, los huevos y los vegetales de hojas verde son algunos de los alimentos en los que se pueden encontrar estas vitaminas de forma natural.
Vitamina K
Esta vitamina es popular por su jugar un papel fundamental en la coagulación de la sangre, pero diferentes estudios han encontrado que la vitamina K puede ayudar a prevenir enfermedades cardíacas, problemas cognitivos, osteoartritis y osteoporosis.
Pero con el paso de los años y las investigaciones los especialistas encontraron más virtudes de esta vitamina que se encuentra en alimentos como las verduras de hoja verde, el brócoli, el hígado, las carnes, los guisantes y los huevos.
Estudios realizados a principios de la década del 2000 encontraron que “las personas que consumen menos vitamina K son más propensas a padecer cardiopatías coronarias, posiblemente porque los vasos sanguíneos que suministran sangre al corazón se vuelven más rígidos y estrechos sin ella”, señalan en Aarp.