Las dolencias generadas en el sistema digestivos pueden ser consideradas muy molestas para la persona que las sufre, desde acidez hasta enfermedades graves como el cáncer de estómago, la aparición de dolores en esta zona del cuerpo es motivo de una consulta al médico.
Con un asertivo diagnóstico, los profesionales de la salud pueden recomendar la mejor ruta para tratar o curar el malestar por el cual se asiste. Sin embargo, la prevención desde casa también es de gran ayuda para mitigar los efectos de las dolencias que no tengan un alto riesgo, pero que aun así pueden ser muy molestas.
La naturaleza y los avances tecnológicos han proporcionado varios productos y bebidas que potencian los componentes orgánicos de los alimentos, y uno de ellos es considerado el principal aliado líquido para tratar los problemas digestivos.
¿De qué bebida se trata?
Es un producto muy similar a la leche y el yogur, con un sabor dulce, pero que no hace daño al cuerpo, además de que es muy fácil de conseguirlo en tiendas de barrio y grandes almacenes de cadena.
El kumis, una bebida fácil de digerir y con buen sabor, es un alimento que contiene muchos nutrientes los cuales son esenciales para el correcto funcionamiento del cuerpo.
Este alimento es de origen asiático y es una bebida láctea fermentada, lo que quiere decir que contiene alcohol, pero en niveles mínimos. Su popularidad es mundial aunque se valora mucho en China, Mongolia y Rusia.
A comparación de la leche a la que se está acostumbrada extraer de la vaca, para el kumis se extrae tradicionalmente de las yeguas, ya que esta leche contiene mayor cantidad de lactosa, más ácidos grasos insaturados y menos proteínas y otros tipos de grasas que la de otros animales, por ese motivo se digiere mejor.
¿Cuáles son las propiedades del kumis?
Al ser una bebida fermentada, el alcohol es uno de sus componentes, el cual puede estar oscilando entre el 0.2% y el 3% de contenido, aunque hay algunos a los que se les aplica mayor cantidad llegando al 4.5%. Incluso en Kazajistán puede llegar a tener un 40% debido a las condiciones de frío en las que se encuentra este país durante una buena parte del año.
Dejando de lado esta propiedad y centrándose en la leche, el kumis tiene buenos contenidos de calcio, zinc, potasio, fósforo, magnesio, ácido fólico y niacina, una vitamina B muy apreciada porque convierte los alimentos en energía ayudando además a mantener sanos los sistemas digestivo, nervioso y la piel.
Sistema digestivo y kumis: Grandes aliados
Uno de los grandes beneficios que tiene el kumis es el bien que le hace la sistema digestivo, además de que, al considerarse un alimento probiótico, esta bebida reactiva y restaura la flora intestinal. Por este motivo se aconseja la ingesta de kumis de manera frecuente, ya que puede ayudar a contrarrestar los efectos negativos de los malos hábitos alimenticios de las personas al saltarse comidas o no tener horarios establecidos para el desayuno, almuerzo y cena.
Además de ayudar a los órganos internos digestivos para que sus funciones no se vean alteradas, el kumis también se utiliza como sanador de gargantas que han sufrido algún tipo de atoramiento por comida al regenerar las paredes del esófago curando así las lesiones presentadas en ese momento.
El sistema óseo también se verá beneficiado, ya que con las cantidades de calcio que posee el kumis puede ser de gran ayuda para el fortalecimiento de los huesos, los dientes y las uñas.
La recomendación es tomar de cuatro a cinco vasos de kumis a la semana con el fin de que las propiedades de este alimento se evidencien en el cuerpo sin olvidar visitar regularmente al médico en caso de que exista alguna restricción para consumirlo.