Tener dientes blancos y completamente alineados, que configuren una sonrisa estética, es el sueño de muchas personas.
Para ello, acuden inicialmente a tratamientos de ortodoncia, con el objetivo de arreglar las imperfecciones ocasionadas por dientes torcidos, y -como paso final- se someten a procesos especializados para conseguir esa tonalidad blanca que desean para su sonrisa.
Con el paso de los años los dientes empiezan a alejarse del color blanco y terminan por tomar un color amarillento. Esto debido a ciertas comidas o bebidas que se impregnan con mayor fuerza en la dentadura y esmalte de los dientes, dañando y manchando su color original.
El presidente del Consejo General de Dentistas, Óscar Castro Reino, señala al portal de nutrición y bienestar Cuídate Plus que “el esmalte dental es un tejido que prácticamente no tiene células. Está formado por minerales (hidroxiapatita) que se depositan de manera perfecta durante la etapa de formación, constituyendo un conjunto de prismas. Se trata del tejido más duro del organismo. La función principal del esmalte es la de protección”.
Al igual que los dientes primarios, los dientes definitivos también pueden intensificar esa tonalidad amarillenta a partir de algunos errores comunes, sobre todo, en los hábitos de higiene. Según un artículo publicado en la página web de Sanitas, una mala higiene dental contribuye a oscurecer el color ya que, al igual que en los dientes de leche, propicia el desarrollo de placa bacteriana.
Muchas personas recurren a costosos tratamientos para tratar de recuperar su color natural y eliminar esos tonos que por estética no lucen bien. Sin embargo, existen formas naturales de hacerle frente a esos cambios en el tono de los dientes.
El portal Grazia listó una serie de recomendaciones con las que es posible blanquear los dientes de forma natural:
- Aceite de coco: además de ayudar a blanquear los dientes, puede quitar el mal aliento. “La clave es mezclarlo con bicarbonato de sodio creando una pasta homogénea cuando te laves los dientes, aplicándolo tres veces por semana para ir notando los cambios”.
- Bicarbonato: es uno de los productos más recomendados para este proceso, pues es uno de los más efectivos. Para utilizarlo, hay que aplicar unas cucharaditas de bicarbonato a la crema dental y cepillar los dientes como normalmente se hace.
- Fresas: la vitamina C de estas frutas posee agentes astringentes que eliminan las manchas de los dientes. El procedimiento para aplicarlo es machacar unas fresas, mezclarlas con bicarbonato, dejarlo actuar en la dentadura por dos minutos y enjuagar.
- Limón: esta fruta siempre ha sido conocida por sus propiedades aclarantes. Es aconsejable mezclar el limón con sal, dejarla actuar por 20 segundos y enjuagar. Si se usa durante un mes, se podrán ver los cambios dentales.
- Plátano: gracias a su alto contenido de ácido fólico, es de los mejores remedios caseros para blanquear los dientes. La recomendación es cepillar los dientes y frotar la cáscara del plátano por dos minutos todos los días.
- Manzana: comer manzana puede contribuir a la eliminación de placa, a quitar el exceso de comida en los dientes y a remover bacterias de la boca. Además, si se agregan gotas de manzana a la pasta de dientes y se deja actuar por unos minutos, desmanchará los dientes.
- Albahaca: se debe dejar la planta por unos minutos al sol, molerla y, con ese polvo, cepillar los dientes. En tres semanas se notarán los cambios.